TEEN SPIRIT
Quizás el tema más controversial del debate que respecta a cigarrillos electrónicos y quemadores de tabaco sea el uso que le están dando los adolescentes. En el último congreso de e-cigarrettes que se llevó a cabo en Londres el tema fue ampliamente debatido por expertos. Fue en respuesta a las declaraciones de Scott Gottlieb, jefe de la FDA, que llamó al uso “una epidemia” entre jóvenes de los Estados Unidos: 20,8 por ciento de chicos en secundaria, dijo, ya es adicto, una suba de 11,7 por ciento solo en un año. El culpable en ese mercado tiene nombre y apellido: Juul vendía sabores fantasía y proponía una cantidad de nicotina por cápsula que equivale a más de un atado de cigarrillos y se consume en mucho menos tiempo, haciendo más dificil de dejar el hábito una vez adquirido. Un informe del Estado de California le puso datos al problema: los “teens” son más propensos a convertirse en usuarios regulares de Juul que de cualquier otro cigarrillo electrónico o quemador de tabaco. “Los mayores de 35 años lo usan para dejar de fumar pero los de 12 y 17 años, y hasta los 25, le dan otro uso. El 82 por ciento lo probó como novedad para ver cómo se siente; gente que nunca había probado un cigarrillo normal. Son inconscientes de su uso, además, y lo usan desde lo recreativo”, dice Maria Bresesco, directora del Observatorio Argentino de Drogas en Sedronar. “Hay un aumento en el vapeo en general pero la franja de menores de edad está en mínimos historicos”, ofrece como contrapunto Escrig. “Son niños pero no imbéciles.”.