PROYECTOS PRESENTADOS A LA UNIDAD CORONAVIRUS
Por disciplina científica
fusión de plasma convaleciente a pacientes en estado crítico puede ser una alternativa terapéutica válida”, concluye Rabinovich.
La pandemia puso de relieve la importancia de la Salud como valor esencial, y de la Ciencia como camino para encontrar una vacuna o un tratamiento efectivo. Pese a los problemas económicos de los últimos años, la Argentina cuenta con una larga tradición de desarrollo científico, cimentada en sus tres premios Nobel en Ciencias (Luis Federico Leloir, César Milstein y Bernardo Houssay), y un sistema académico y de investigación aún en pie. “Tener soberanía tecnológica es lo que nos puede salvar en momentos como éste”, concluye Fernando Peirano. “Cuando la cadena global de suministros está colapsada, y los países se enfrentan para conseguir equipamiento e insumos críticos”.
El diagnóstico rápido y confiable es una de las prioridades a la hora de enfrentar la pandemia de Covid-19. Además de las pruebas de reacción en cadena de la polimerasa (PCR, por sus siglas en inglés), que realizan el Malbrán y la red de laboratorios de Anlis, existen en la Argentina al menos cuatro grupos en fase avanzada de desarrollo de kits diagnósticos portátiles en el marco de la convocatoria “Unidad Coronavirus”. Dos de ellos son spin offs de base tecnológica surgidos en universidades que ya estaban trabajando en kits de detección para dengue y los están reconvirtiendo para coronavirus. Hay otro equipo liderado por investigadores del Conicet y un cuarto grupo en la Fundación Instituto Leloir, liderado por la viróloga molecular Andrea Gamarnik, que en menos de 45 días desarrollaron un test serológico que ya fue validado por Anmat. “Existen distintos tipos de pruebas”, explica el biólogo molecular Diego Comerci, investigador y docente en la Unsam y socio de Chemtest. “Están las pruebas de PCR para detectar presencia directa del virus, y hay test indirectos, que buscan los rastros inmunológicos que dejó el virus en el organismo, como son los anticuerpos”. Chemtest, compañía que cofundó en 2015, había lanzado a fin de febrero un kit de detección rápida de dengue que utiliza tiras reactivas (similares a las pruebas de embarazo) para identificar el virus sin necesidad de trasladar las muestras a un laboratorio. Sobre esta base, ante la aparición del primer caso (importado) de coronovarus en el país el 3 de marzo, fue consultado desde el Ministerio de Ciencia sobre si se podía desarrollar un kit similar para el coronavirus. “Claro que sí, pero no lo podemos hacer solos”,
Las empresas argentinas dieron una respuesta rápida y concreta a la crisis. Más allá de los 64 proyectos en estudio, ya hay siete casos autóctonos para entusiarmarse... y con potencial exportador.