EL TINELLI DE TIK TOK
Mientras Facebook atraviesa sus últimos estertores, Twitter refunfuña, Snapchat desaparece, Instagram se apoya en el hipsterismo y Spotify densea en boricua, un jovencísimo Tiktok irrumpe en la escena comprimiendo frescura. Una voz en off locuta: “Del estudio cinematográfico que trajo: juguetes que hablan, autos que hablan y emociones que hablan, llega… App Story”. Y de la imaginación de Fermín Bo, esta parodia a Toy Story que muestra cómo serían las redes sociales si fuesen personas. Con casi 3 millones de reproducciones en la plataforma Tiktok, el video “App Story” es apenas otro escalón en la carrera de Bo, un creador de contenido que explota las parodias y el universo de la televisión. “Usualmente, los generadores de contenidos digitales quieren diferenciarse lo más posible de la TV”, asoma Bo, que nada tiene que ver con el cineasta Armando y que se confiesa fanático de los rayos catódicos. En un principio, él también intentó buscar otros rumbos, pero sintió que no estaba siendo sincero consigo mismo: su admiración por Showmatch y ese universo popular, mediático y farandulero pesaba más que todo. ¡Si hasta tuvo su encontronazo al aire con Aníbal Pachano! “Siempre jugaba a imitar a Marcelo Tinelli, venía mi familia a casa, mis abuelas hacían de jurado, me ponía unas mangas de tatuaje y hacíamos el certamen en el que participaban mis hermanos y mis primas”, dice. Y sigue: “Tinelli es un director de orquesta”. Entre sus parodias más populares: una de “Felices los 4” de Maluma con 4 millones de reproducciones en Youtube. “Siempre me divirtieron mucho las parodias y desde chico me gustaba consumirlas”. Mezcla de Videomatch, algo del espíritu demente de los Monty Python y otro poco de la psicodelia lo-fi de Cha Cha Cha reconoce que en ese formato se siente cómodo. Hoy, ostenta unos 24.000 seguidores en Youtube, 232.000 en Tiktok y 380.000 en Instagram que, reconoce, significó un salto. “Es el lugar que me llevó a cumplir todos mis sueños”. Allí logró viralizarse con “Néstor Pijama”, en alusión al referí Néstor Pitana, un sketch de un árbitro en la vida cotidiana. Y también con “Las Ventanas de Guido”, una parodia de Las Puertas de Guido Kaczka, e “Intensamente”, un tributo cómico a la película de Disney. “Yo empecé en las redes para llegar a los medios tradicionales”, desnuda Bo. A la sazón, estudió locución, tuvo su propia radio, trabajó en S.T.O. La Previa junto a Sofi Morandi y Julián Serrano, protagoniza la obra teatral Estamos en la misma, trabaja en La Flia (sí, se le dio: pasa sus días en la productora de Tinelli) y ya lo buscaron Mcdonald’s, Pedidos Ya, Mercado Libre, La Serenísima, Pepsico, Garnier, Reebok y muchas marcas más. Entretanto, el locutor y actor de 22 años tiene en claro que su reverberación tiene un precio. Por eso, reniega de los canjes. “Me molesta ver una historia en el desayuno de alguien haciendo canje, con el almuerzo de canje, y la cena de canje. Me prometí evitar eso. Las cuentas de Instagram son como mini canales de televisión, y si cada dos historias estás promocionando algo, lo que decís pierde peso”, sacude. Fermín ya grabó una continuación de “App Story” con Netflix, Linkedin, Google Maps y Youtube de protagonistas.
“LAS REDES SOCIALES ME AYUDARON A CUMPLIR TODOS MIS SUEÑOS.” Fermín Bo, tiktoker e instagrammer.