TECNOLOGÍA RÁPIDA
La CTO de Arcos Dorados viene acompañando la evolución de los sistemas desde hace muchos años. Pero su rol técnico cada vez se alinea más a la esencia del negocio de comidas rápidas.
Cuando empezó su carrera Magdalena González Victorica, CTO de Arcos Dorados, no sabía que iba a terminar supervisando, dirigiendo y pensando proyectos complejos de IT para esta compañía pública internacional. La historia laboral de González Victorica comienza tras su egreso de la UCA, como flamante contadora, al ingresar en una consultora especializada en Auditoria. En 1999 se sumó al sector de Finanzas de la cadena Mcdonalds. Todo indicaba que iba a hacer una carrera en su propio ámbito, pero —al año de su ingreso— recibió una propuesta original: "me ofrecieron, con otro colega, supervisar la implementación de un sistema de IT que ya se usaba en la Argentina pero que teníamos que desplegar en varios países de América latina", recuerda en diálogo con este medio. Así la contadora, cuya única experiencia en sistemas era por el lado de usuaria, tuvo que sumergirse de lleno en el mundo de los servidores, redes, soluciones ERP, Warehouses y demás temas IT. Y, además, sumó que debió viajar e instalarse en México para concretar ese primer paso. Tras el éxito del primer escalón, la compañía le pidió que siguiera supervisando dichos despliegues. Así viajó por una larga cantidad de países de la región, incluyendo Puerto Rico, Venezuela, Brasil y el resto de la veintena de naciones en los que operaba la empresa. Algo que, obviamente, la hizo ir aprendiendo y especializándose en muchas temáticas de tecnología. En 2005 a sus tareas internacionales sumó la implementación del Centro de Servicios que, desde Buenos Aires, le daba soporte a las demandas de los departamentos de Sistemas, Recursos Humanos y Finanzas de otros países. Y, en un paso lógico, en 2007 pasó a dirigir dicho Centro.entre sus recuerdos de esa época destaca que "tuve que aprender a dominar cantidades de temas de IT, por medio
de cursos y prácticas. Pero también aprendí y creí mucho teniendo que trabajar con prácticas, negociaciones y detalles IT de otras culturas y países". Su siguiente salto profesional ocurrió en 2007 cuando Arcos Dorados se lanzó como compañía independiente y eso significó, entre otras cosas, el poder diseñar su propia política en materia de tecnología, ya sin depender de decisiones corporativas. "Eso nos permitió repensar qué significa la tecnología para Arcos Dorados. También desde que elegir hasta la forma de adopción de las herramientas disponibles para consolidar resultados regionales", cuenta. Otro paso significativo que recuerda fue en 2011 cuando la compañía salió a cotizar en bolsa y debió acompañar desde la tecnología ese requerimiento tan particular. "En 2017, la compañía volvió a ponerle un foco muy fuerte a la tecnología, especialmente como apalancamiento de todo el negocio”, subraya. “En ese momento, la empresa empezó a modernizar sus locales en base al concepto de ‘Experimentar el futuro’, donde la digitalización comenzó a protagonizar varios temas del devenir empresario.”
Finalmente llegó 2019 y, de la mano de un nuevo CEO, la empresa decidió abrazar en forma integral la digitalización del negocio como forma de apalancar el crecimiento e implementar nuevas formas de trabajo, siguiendo metodologías ágiles y también buscando romper algunas estructuras verticales para trabajar con equipos horizontales, donde rigiera la innovación. Con ese norte, el board de Arcos Dorados decidió armar una unidad nueva, internamente conocida como la "fábrica digital" que comenzó a operar en marzo del 2020, en coincidencia con la pandemia. Pero era tan grande la promesa que la organización decidió continuar. "En el 2020 comenzó a operar la 'fábrica', aunque en forma virtual, pero siguiendo ideas 'ágiles' y con metodología Scrum, armando diversos Squads para atacar diversas problemáticas", cuenta la entrevistada. En la "fábrica", los equipos proponen soluciones para mejorar el negocio de los restaurantes, poner a punto innovaciones, experimentarlas e implementarlas en el menor tiempo. Respecto al proyecto más importante que encaró desde que está en la empresa, Favilia piensa en tres. “Mi primer encargo, la implementación del datawarehouse en toda la región fue desafiante y aprendí muchísimo”, cuenta y sigue: “Otro fue la modernización de los restaurantes que, a partir de 2016, hizo que la tecnología dejara de ser ‘soporte’ del negocio para convertirse en estratégica. Esa modernización requirió de inversión y también de muchas pruebas, incluido un gran cambio de perfil en recursos humanos. Y los resultados terminaron siendo muy satisfactorios”. Finalmente cierra con el proyecto más actual, la ‘fábrica digital’, que hoy es esencial. Y un ejemplo lo muestra: “El 40 por ciento de las ventas de Mcdonalds hoy se originan en el formato "digital", sea por nuestra app o por los quioscos de cada restaurant. Y ese porcentaje va a seguir creciendo", resalta.