SAKE CON COLA
Este empresario e influencer se volvió viral en 2018 y desde entonces se dedica a una sola cosa: unir la cultura japonesa y la argentina por medio de sus productos.
“MI PRIMER VIAJE FUE PARA VER A BOCA.”
Isamu Kato, influencer y empresario.
El nombre de Isamu Kato se mencionó sin parar como parte de la previa del partido entre Boca y River por la final de la Copa Libertadores en 2018, cuando decidió viajar 33 horas desde Japón para ver el partido pero tuvo que volverse con las manos vacías luego de que se suspendió el juego por mal clima. Desde entonces es una especie de figura famosa dentro del nicho xeneize, que sorprende a propios y extraños por mostrar un gran fanatismo por el cuadro de la rivera a pesar de haber nacido a casi 18.000 kilómetros de distancia. “Mi primer contacto con Boca fue hace 22 años, cuando más de 10.000 hinchas vinieron a ver al equipo jugar la final de la Copa Intercontinental contra el Real Madrid”, asegura el influencer y suma: “Más adelante, en 2009, me contacté por primera vez con argentinos por medio de redes sociales para poder planear un viaje a Buenos Aires. Y ese año ya me tomé un avión por primera vez con rumbo a La Bombonera”. Pero su relación con Argentina va mucho más allá del fútbol. Desde asados, fernet y mate en Kioto hasta una empresa que fabrica una variante japonesa de los alfajores (bajo el nombre de “aljapones”), la vida de Kato gira en torno a la Argentina. A día de hoy, el reconocido personaje de internet cuenta con una gran base de seguidores en redes sociales. La misma está compuesta por más de 20.000 personas en Twitter, unos 65.000 usuarios de Instagram —su principal red social— y casi 10.000 suscriptores en Youtube. Al hablar sobre su presencia digital, el influencer contó cómo cambió de contenido principalmente en japonés a publicaciones en español. “Me di cuenta que si no publicaba en español mis seguidores no me entenderían”, precisó. “Siempre intento mezclar la cultura argentina y japonesa”, cuenta. “Tengo un amigo japonés que también ama la Argentina y año pasado empezamos un proyecto donde mezclamos un dulce tradicional como el Dorayaki con el dulce de leche para crear el aljapone”, agrega. Actualmente se dedican a venderlos en la antigua capital japonesa bajo la marca de “Isamitos”, los cuales según cuenta son en honor a la famosa marca argentina de alfajores Jorgito. Estas semanas se encontró en la Argentina para patrocinar la marca, visitar la fábrica de Jorgito para compartir con la compañía de dulces el “aljapón” que vende en japón y, por supuesto, ver a Boca en la definición del campeonato, donde el Xeneize terminó consagrándose. “Hay dos cosas que siempre me sorprenden”, cuenta y cierra: “Por un lado el amor y la pasión que sienten todos por el fútbol, algo que no se ve tanto en Japón. Y por el otro, la amabilidad que tiene toda la gente para recibirte. Eso es algo que no cambió desde la primera vez que vine”.t.h.