“QUEREMOS REVOLUCIONAR EL SISTEMA EDUCATIVO MUNDIAL”
Escuchar hablar de Egg puede llevar a alguien, a priori, a pensar que se trata de una marca de alimentos o vinculada con el mundo animal. Sin embargo, se trata de una empresa de ciencia y tecnología basada en cooperación humana. Ignacio Gómez Portillo, el CEO de Egg, esclarece el origen del nombre de su startup: “En el larguísimo plazo queremos resolver preguntas que tiene la humanidad, y el huevo hace referencia a eso, porque representa a una pregunta”. Hoy el foco del emprendimiento es resolver la escasez de talento, y para eso el pilar central es la cooperación humana. El diferencial de Egg es que ha desarrollado un sistema para escalar la educación superando las dos modalidades educativas actuales. “Hoy existen plataformas altamente escalables pero que tienen dificultades para llegar profundamente al aprendizaje, como son los cursos online masivos. Por otro lado, tenemos sistemas por cohorte que llegan a lo profundo del aprendizaje pero son difíciles de escalar porque lo hacen con recurso humano”, ilustra el CEO. La tecnología de cooperación basada en principios científicos e IA combina la efectividad de la educación tradicional con la escala de un curso online masivo. Esto les ha permitido tener hasta ahora un total de 70.000 estudiantes, de los cuales 50.000 se capacitaron este año, y las proyecciones muestran cifras muy superiores. Con la escala de crecimiento exponencial, Gómez Portillo asegura que Egg puede terminar con la escasez de programadores.“tenemos 100 colaboradores en relación de dependencia, y el 70 por ciento del negocio está en el país, aunque estamos abriendo operaciones en el exterior”, concluye.