LA EPOPEYA DE VIRGIL
Viene de un año en el que marcó el pulso de la moda. Asumió la dirección artística de la línea masculina de Louis Vuitton y multiplicó las colaboraciones de su marca Off-White. Encuentro
con quien mejor conoce el espíritu de su tiempo.
Semejante nombre tiene que ser un indicio. La promesa de una trayectoria épica, orientada a la realización de una obra de dimensiones históricas. Virgilio, el poeta, de nombre completo Publius Vergilius Maro, nacido cerca de Mantua en el año 70 a.C., surcó Asia Menor y Grecia para pulir La Eneida, epopeya que mezcla mitos fundacionales y observaciones de un mundo en mutación, entre fines de la república romana y comienzos del Imperio de Augusto. Virgil Abloh, el diseñador estadounidense, fundador de la marca Off-White y director artístico, desde hace un año, del universo masculino de Louis Vuitton, no se queda atrás. Nacido veinte años antes del 2000 (un 30 de septiembre) en Rockford, Illinois, vive en un avión y atraviesa varios husos horarios por semana con un objetivo también testimonial. A través de sus creaciones, narra el nacimiento de un nuevo imperio, el de los millennials –el segmento más mimado en el mercado del lujo–, y la gran aventura de la llegada a las puertas del poder de la Generación Y, la suya. Se trata de individuos nacidos entre 1980 y mediados de los año 90, habituados a los códigos de la hiperconectividad y el cruce de influencias, inmersos en lo digital desde su invención y capaces de fusionar todo lo que los excita: moda, música, tipografía, arte, deporte… Un estado de ánimo que el hiperactivo diseñador, elegido entre las cien personas más influyentes del mundo en 2018 por la revista Time, comparte espontáneamente. En