El cepo cambiario complica a YPF
Contratistas temen no poder enviar ganancias al exterior
Titánica tarea tiene por delante Miguel Galuccio, el presidente y CEO de YPF. No sólo debe vencer las reticencias de la inversión extranjera en el país que heredó por la nacionalización de su empresa, sino que también tendrá dificultades para contratar el equipamiento que necesita para dar el golpe de timón en la producción de crudo y gas que prometió.
Sucede que las principales proveedoras internacionales para la industria petrolera (alquilan unidades de perforación, fractura y terminación, entre otras) no se deciden aún a traer maquinaria de última tecnología al país.
Hay dos motivos sobresalientes: por un lado, sufren en carne propia las complicaciones para importar tecnología multimillonaria, que en algunos casos demora meses para salir del Puerto de Buenos Aires debido a la aversión del Gobierno a la llegada de productos del exterior.
Además, en caso de registrar utilidades, las compañías temen no poder girar dividendos a sus casas matrices, tal como rige hoy para casi todas las empresas con operaciones en el país.
Entre las grandes candidatas a proveer los equipamientos que necesita YPF – piezas clave del llamado plan de los 100 días, con promesas de inversión por US$ 37.200 millones– figuran empresas internacionales, pero con actividad en la Argentina: desde Schlumberger, un gigante del negocio desde donde Galuccio dio el salto a YPF, hasta Halliburton, DLS, Helmerich & Payne, Weatherford, Baker, Ensinck y San Antonio, entre otras.
Tres ejecutivos de diferentes empresas de servicios coincidieron en un mensaje ante la consulta de la
nacion: hasta ahora, les resulta más fuerte la incertidumbre que les genera a sus empresas traer equipos millonarios a la Argentina que la seducción del megaplán de YPF, con quien ya iniciaron contactos.
En el mismo sentido, dos ejecutivos de primera línea de empresas petroleras reconocieron problemas para ponerse de acuerdo con sus proveedores por los mismos motivos.ß
Viene de tapa “Hasta ahora, nos arreglamos con lo que tenemos”, explicó uno de ellos. “Éste es un negocio de mercenarios. Los equipos van a ir a donde se recupere la inversión, algo que no está garantizado por las trabas a girar dividendos”, se sinceró el presidente de una de las mayores compañías. Su empresa tuvo varios meses frenado en Aduana el ingreso de una máquina de unos US$ 30 millones. “¿Cómo explico esa demora a mi casa matriz?”, se preguntó.
Las trabas al ingreso de maquinaria no hacen distinción entre empresas. Meses atrás, el gobernador de Neuquén, Jorge Sapag, tuvo que interceder ante el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, para destrabar la llegada de un equipo. Aunque el patagónico está alineado con el Gobierno, debió responder varias preguntas para liberar el embarque.
En otra de las compañías internacionales con actividad en el país reconocieron que se debieron comprometer con la oficina de Moreno a realizar exportaciones por un valor similar al del equipo ingresado. La compañía, en realidad, no tenía definido cómo hacerlo, pero le urgía disponer de la unidad que estaba varada.
El plan de Galuccio enfrenta otra dificultad: para alquilar la clase de equipamiento que busca, de última generación, para explorar y producir en yacimientos no convencionales, hay una lista de espera y demoras de hasta un año.
En YPF están al tanto de las dificultades y ya iniciaron las tratativas con posibles proveedores tecnológicos. Si bien creen que la actividad para este año podrá ser cubierta con unidades que ya están en el país, equipos técnicos y ejecutivos de la empresa comenzaron hace por lo menos un mes a buscar ofertas para incorporar maquinaria desde 2013.
Algunas de las posibles proveedoras fueron convocadas por Gerardo Doria, director de Upstream (exploración y producción de hidrocarburos) de la empresa.
la nacion tuvo acceso al borrador que elaboró una de las compañías interesadas en proveer de servicios a YPF para cotejar la propuesta con su casa matriz. Allí se establece que el capital necesario para atender una locación específica de producción (clúster) ronda los US$ 500 millones. Incluye 12 equipos de perforación, 4 de reparación, una unidad de fractu- ra, camiones y otras facilidades.
De acuerdo con los empresarios que escucharon la propuesta de YPF, la compañía está dispuesta a firmar contratos a cuatro o cinco años. E ingresar aproximadamente 12 equipos el año que viene; 24, en 2014; 36, en 2015, y 40, en 2016.
Es una masa enorme de equipamiento. El 13 de septiembre, por ejemplo, estaban en funciones 89 unidades de perforación, de las cuales 71 estaban al servicio de YPF.
De manera que Galuccio quiere, cuanto menos, sumar un 10% a la dotación nacional.
Emisión de ON
Por otra parte, YPF lanzó ayer una nueva una oferta de suscripción de títulos por hasta 600,4 millones de dólares. Vinculados a la evolución de la cotización oficial del dólar estadounidense, serán colocados entre el 15 y el 17 de octubre, se indicó.
Serán ofrecidas Obligaciones Negociables clase IX de la firma controlada por el Estado por 50 millones de dólares, ampliables a 175 millones y clase X por valor de hasta 2000 millones de dólares, por el regulador bursátil, informó ayer la empresa a la comisión nacional de valores (CNV).ß