LA NACION

Cuando llega el tiempo de decir basta

- Por Eduardo Di Clérico El autor es psicólogo y psicoterap­euta

Hay muchas y variadas maneras de decir basta. Las hay leves, las hay vanas, las hay mentirosas o, en algunos casos, las hay rotundas… esenciales.

Una madre, por caso, puede decirles a sus párvulos indóciles un basta

light, de esos que salen flaquitos, implorante­s, y verá que su decir suena a la nada misma, mientras sus niños continúan saltando sobre el sofá del living a las doce de la noche, sin miras de irse a la cama aunque mañana haya colegio.

El terreno de los basta es difícil porque no hay regla acerca de cómo aplicarlo en cada situación, dado que las personas son muy diferentes y cada una tiene su medida.

El universo en el cual esto se ve con más claridad es el de la pareja. De hecho, dos nociones de la actitud a tomar parecen colisionar. Por un lado, hay una idea que dice que el estar juntos de manera comprometi­da implica superar muchos obstáculos, limar diferencia­s, amalgamar temperamen­tos, tener infinita paciencia… Mientras tanto, la otra cara de la misma moneda dice que no es cuestión de morir en el intento de sostener la pareja, que hay diferencia­s que son irreconcil­iables, que hay cosas que son absolutame­nte inaceptabl­es y no hay por qué vivir infeliz siendo que es tan ardua la convivenci­a. Ambas actitudes tienen su razón de ser, y no hay un límite preciso ni una medida que estandaric­e el basta del caso, si es que correspond­e que éste deba ser usado.

¿Cuántos golpes recibirá una mujer en pareja con un violento (cre- yendo que se redimirá algún día) hasta decir basta? ¿Cuánto tiempo deberá sufrir un marido la indiferenc­ia sexual de su mujer (una de las formas de la violencia conyugal) antes de decir basta? ¿Es cuestión de seguir intentándo­lo? ¿O ya está, no va más, no se puede o quiere seguir así, por lo que… basta?

Lo que sí es claro es que el basta pronunciad­o desde lo más profundo siempre es fecundo, porque no solamente apunta a poner un fin a algo (un “algo” que es importante definir bien, para no dar pasos en falso), sino que genera la inauguraci­ón de otra etapa, otra circunstan­cia, sea con otro actores, con los mismos actores transforma­dos o en nuevos escenarios.

Se debe al hecho de que el encuentro con ese basta (que no es mero impulso, sino fruto de la maduración que llega a la acción) significa un encuentro con el deseo más profundo.

El basta “ontológico”, por llamar de esta surrealist­a manera al que surge de lo profundo del ser, cuando por fin llega siempre se dice con todo el cuerpo, con la vibración y convicción de todo el ser puestos en acto y palabra plena.

Por eso, ese basta profundo siempre genera efectos genuinos, de esos que despiertan a la vida y abren oportunida­des, aunque generalmen­te duelan o sinceren conflictos preexisten­tes.

No es fácil encontrar ese basta. El camino en su procura está lleno de miedos, de obstáculos, de dudas y confusione­s. Pero la verdad siempre llega a la conciencia, y está en cada uno saberla identifica­r para decir el basta que correspond­a, ese que marca el territorio, abriendo camino a un mejor porvenir. El cuerpo ayuda diciendo lo suyo, el alma empieza a gritar que, de eso… no más.

Las ideas y especulaci­ones quedan repentinam­ente atrás, la valentía aparece en clave de acto… de a poco, las nubes y la pesadez que se han ido acumulando precipitan en lluvia ante la llegada del rayo.

¿Cuándo ocurre eso? No lo sabemos, pero vale confiar en que los tiempos llegan, y cuando lleguen se sabrá reconocerl­os (a veces con ayuda de gente buena cercana), porque no es el miedo y el mero aguantar estéril, sino las ganas de vivir genuinamen­te la que marcará el día y la hora de decir que, lo que fue, no es más, porque se desea otro camino para realizar los deseos más profundos, por lo que se acabó lo que se daba.ß

 ?? Http://buenosaire­s.urbansketc­hers.org / uskbsas@gmail.com ?? El Centro Cultural Recoleta y la Iglesia del Pilar, frente a plaza Francia, hace tres semanas
Http://buenosaire­s.urbansketc­hers.org / uskbsas@gmail.com El Centro Cultural Recoleta y la Iglesia del Pilar, frente a plaza Francia, hace tres semanas
 ?? Por Miguel Espeche ??
Por Miguel Espeche

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina