Apuran los opositores su estrategia electoral
Hay consenso en que Capriles es el único candidato posible, pero aún quedan detalles por negociar
CARACAS.– Henrique Capriles está decidido a batir un récord Guinness: la disputa de cuatro procesos electorales en sólo 14 meses. En febrero de 2012 obtuvo el 62% de los tres millones de votos opositores en sus primarias. El 7 de octubre cayó ante el invencible Hugo Chávez, pero cosechó casi el 45% de las boletas. En diciembre batió al canciller Elías Jaua para repetir al frente de la gobernación de Miranda.
Su próximo rival se llama Nicolás Maduro. La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) espera el mejor momento para presentar a su abanderado ante una cita electoral que se viene en abril y para la que el gobernador parte con una gran desventaja: el impacto emocional causado por la muerte del comandante. Capriles, que también superó en 2008 al todopoderoso Diosdado Cabello, es la única carta ganadora en la oposición. Se espera que consiga la unanimidad de todos los integrantes de la mesa.
La lectura anteayer del comunicado de la MUD evidenció la intención de soldar, aunque sea momentáneamente, la fractura abierta entre Capriles y su partido, Primero Justicia, y varias de las organizaciones de la “vieja” Venezuela, como AD y Copei.
Capriles instó al gobierno y a las fuerzas armadas a cumplir la Constitución y llamó a un “diálogo nacional” para “garantizar entre todos la paz”. En nombre de la alianza opositora, lanzó su propuesta de reconciliación a todos los venezolanos.
La mesa ultima una serie de acuerdos internos para que la decisión salga a la luz de forma inmediata. Los partidos quieren más presencia en la campaña y también que Capriles asuma un compromiso de no reelección. La tarjeta única (que todas las organizaciones asuman una sola y no como en el 7 de octubre, cuando los votantes opositores debían elegir una en las tarjetas electorales) también está muy avanzada. Estos acuerdos exprés han limado parte de las diferencias internas.
Falta determinar también quién acompañará a Capriles en la campaña relámpago. En los mentideros políticos de Caracas se estima que Henri Falcón, gobernador de Lara y popular dirigente ex chavista, será su jefe de campaña. El antiguo dirigente de Patria para Todos también sufre el acoso, como Capriles, de parte del oficialismo. ¿Su pecado? Ser uno de los “traidores” que abandonaron la causa de Chávez y ser reelecto como gobernador en las regionales de diciembre.
Falcón, que se afeitó el bigote para huir de la estética anticuada de Maduro, tuvo ayer palabras de reconciliación. “Debemos asumir estos momentos con sensatez, prudencia y madurez política. Tenemos que ser los mejores intermediarios e interlocutores, no sólo de las necesidades de la gente, sino de la posibilidad de transitar una etapa difícil para todos los venezolanos”, destacó.
La otra Venezuela, la que apoya a Capriles en su inmensa mayoría (en la última encuesta de Datanálisis, el gobernador superaba en más de 70% a los otros líderes), también está viviendo la muerte de Chávez como un terremoto político. En 14 años, ayer fue el primer día que el país despertó y ya no mandaba el comandante que tanto ha influido en sus vidas.
Sólo la excitada bocina de los autos, en zonas de clase media alta, rompió el silencio de las primeras horas. Las imágenes llegadas desde Miami, donde venezolanos mostraron su entusiasmo tras conocer el deceso, no fueron bien recibidas. El antichavismo dejó claro en la calle y en las redes sociales que respeta, pero no olvida. ß