Dilma alinea a la región con Maduro
Habló con los gobiernos sudamericanos para intentar armar una suerte de frente internacional que garantice la estabilidad política y una transición ordenada en Venezuela; viaja a Caracas con Lula RÍO DE JANEIRO.– Mientras se preparaba ayer para viajar en las próximas horas a Caracas, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, ya comenzó a desplegar todos sus esfuerzos para garantizar la estabilidad en Venezuela tras la muerte de Hugo Chávez y evitar que a grupos dentro del chavismo y de los militares se les ocurra intentar un eventual golpe.
Según indicaron a LA NACION fuen-tes gubernamentales, la presidenta dialogó con sus pares de la Argentina, Cristina Fernández; de Uruguay, José Mujica; de Bolivia, Evo Morales; de Ecuador, Rafael Correa, y de Colombia, Juan Manuel Santos, para crear una suerte de frente regional que defienda la democracia en Venezuela.
“A Brasil le interesa que se respete la institucionalidad democrática, que el país transite con normalidad este período de transición hasta las elecciones”, indicó a un LA NACION di-plomático brasileño que requirió el anonimato, pero reconoció que el canciller Antonio Patriota está detrás de las tratativas.
El gobierno brasileño ya se había movilizado de la misma manera en enero, cuando era claro que la larga convalecencia de Chávez en Cuba no le permitiría estar a tiempo en Caracas el 10 de enero para la toma de posesión de su nuevo mandato.
Entonces, el asesor presidencial sobre Asuntos Internacionales, Marco Aurelio García, viajó a Cuba para interiorizarse sobre la salud de Chávez y expresó su apoyo a Nicolás Maduro como vicepresidente a cargo del gobierno, tal como fue confirmado por el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela.
“El apoyo a Maduro es claro ahora también. Frente al clima de nerviosismo y expectativa que hay en Venezuela, para el gobierno brasileño es importante emitir señales de que cualquier tentación autoritaria o de desvío de la institucionalidad por parte de los militares no será tolerada”, señaló el periodista y analista político Kennedy Alencar.
“El gobierno brasileño tiene una simpatía política extremamente mayor hacia Maduro que hacia cualquier otra figura dentro del chavismo; lo mira con muchos mejores ojos que a Diosdado Cabello. Pero reconoce que Maduro no tiene ni el carisma de Chávez ni fuerza política propia. Por eso es importante fortalecerlo para que no lo desgasten las luchas internas del chavismo en esta transición”, agregó.
Ayer se esperaba que también via- jara a Caracas el ex presidente Luiz Inacio Lula da Silva, amigo cercano de Chávez, para quien incluso grabó un aviso proselitista durante los últimos comicios en Venezuela.
En tanto, desde el oficialista Partido de los Trabajadores (PT), se emitió un comunicado de pésame por el fallecimiento de Chávez, a quien se definió como un “héroe de la América latina y caribeña”.
“Abrazamos a los familiares, amigos, colegas de uniforme y camaradas de creencia de Chávez y les decimos: cuenten con nosotros, cuenten con el PT para dar continuidad a las grandes conquistas políticas y sociales iniciadas por Hugo Chávez.”