Alak relativizó críticas de la Iglesia
Recibió a miembros de la Comisión de Justicia y Paz, que ratificaron el documento
El ministro de Justicia, Julio Alak, recibió ayer a representantes de la Comisión Nacional de Justicia y Paz, dependiente del Episcopado, que había manifestado sus discrepancias sobre el proyecto de “democratización” de la Justicia impulsado por Cristina Kirchner.
Tras el encuentro, el ministro relativizó las críticas formuladas en el documento y expresó que los miembros de la comisión episcopal “manifestaron su voluntad de participar del debate [de la reforma judicial] y señalaron coincidencias con los proyectos que impulsa el Gobierno”.
A la reunión concurrieron el presidente de Justicia y Paz, Gabriel Castelli, y Juan G. Navarro Floria, asesor del Episcopado en asuntos jurídicos, quienes ratificaron que el documento no constituye un enfrentamiento con el Gobierno.
En un comunicado, el ministro Alak priorizó las coincidencias señaladas en el documento de la Iglesia, como la necesidad de avanzar en una reforma judicial, e informó que los delegados de la comisión episcopal habían denunciado que “la presión de los grupos económicos sobre la Justicia es inadmisible”. Pero, en diálogo con la nacion, Navarro Floria ratificó el contenido del documento y condenó las presiones contra los jueces. Dijo, al respecto, que “las presiones del Estado merecen una condena más fuerte, dado que, como ocurre en otros temas, el Estado es el garante de la legalidad”.
Mientras Alak denunció que algunos medios periodísticos habían dado a conocer “un borrador apócrifo” del documento, con “conceptos que no están incluidos en la versión oficial”, Navarro Floria admitió que había circulado un borrador de trabajo del documento, sobre el cual luego se hicieron pequeñas correcciones, pero que “no cambian la posición de la comisión episcopal sobre el proyecto oficial”.
En tanto, el ministro se reunió ayer con unos 30 representantes del grupo Justicia Legítima, que la semana pasada habían expresado su respaldo a la reforma impulsada por el Gobierno.
Encabezados por la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, el grupo presentó los lineamientos expuestos en la Biblioteca Nacional por unos 1000 representantes del Poder Judicial y otras instituciones vinculadas con la Justicia, y anunció que habrá un nuevo encuentro el 31 de mayo, en La Plata.
“El Poder Judicial no es de los jueces ni de los abogados: es del pueblo”, dijo Alak, al mostrarse convencido de que “en un Estado democrático la participación de representantes de las corporaciones en el Gobierno tiene que ser muy excepcional y limitada”.