Macri y Lavagna suspendieron los contactos y peligra el acuerdo

Al volver de Nueva York, el líder de Pro pidió “reevaluar todo”; el ex ministro de Economía planea postularse

Los teléfonos dejaron de sonar y el entusiasmo dio lugar al escepticismo. Mauricio Macri y Roberto Lavagna decidieron tomarse unos días y suspender por ese lapso las negociaciones que los encaminaban a afrontar juntos las elecciones legislativas en Capital.

A su regreso de Estados Unidos, el jefe de gobierno porteño se mostró en un centro de primera infancia de Villa Lugano, junto a la vicejefa María Eugenia Vidal, y ordenó suspender los contactos con el ex ministro de Economía kirchnerista, que hasta hace pocos días asomaba como seguro primer candidato a senador en una lista conjunta entre peronistas y macristas en la ciudad.

“No hay reuniones previstas esta semana”, afirmó a la nacion una alta fuente de Pro nacional. Aunque lo negó parcialmente en público, Macri sigue enojado por la foto que unió a Lavagna con peronistas disidentes, como José Manuel de la Sota, Hugo Moyano y Francisco de Narváez, el 1° de este mes.

“Nos dice que no quiere al resto de los peronistas, que va a venir solo (a la alianza), y después aparece con ellos en actos y solicitadas”, se quejó una fuente muy cercana al jefe de gobierno, horas antes de que Lavagna compartiera ayer una nueva foto con sus aliados peronistas en la presentación del nuevo partido de Moyano (ver aparte).

Precisamente, Moyano es uno de los nombres que despierta más res- quemores en el macrismo. “No es que tengamos nada contra él, pero representa el peor de los estilos del sindicalismo. Quedamos desdibujados como partido si vamos a un acuerdo de este tipo” afirmó a la

nacion un dirigente de buen diálogo con Gabriela Michetti, que ya había dado su aval para ser la compañera de fórmula de Lavagna en la pelea por la senaduría en octubre.

Según fuentes de Pro, que ayer guardaron estricto silencio mediá-

“Queremos a Lavagna, pero que venga solo”, dicen desde el macrismo

tico, Macri tomó nota de las quejas internas de su propio partido y decidió frenar por unos días las conversaciones. “Queremos a Lavagna, pero queremos que venga solo”, afirmó otra figura del macrismo.

En Bolívar 1 aseguran que Moyano pretende ubicar en las listas de postulantes a diputados nacionales al judicial Julio Piumato; Gerónimo Venegas, titular de Uatre, pelearía por un lugar para el periodista y actual vocero Carlos Campolongo y Lavagna el segundo lugar de la lista de diputados nacionales para el diplomático Rodolfo Gil, un pedido ya aceptado por Pro.

“La foto que se sacaron en Córdoba no es un tema menor. Una cosa es Lavagna y otra todo el res- to”, completó otra fuente de Pro.

En el macrismo también hay algunos pases de factura internos, por ahora en voz apenas audible. Sobre todo se dirigen hacia el secretario general porteño, Marcos Peña, y el ministro de Gobierno, Emilio Monzó, encargados de manera personal de cerrar trato con el ex ministro. Es sólo una muestra de las divisiones: mientras un sector de Pro quiere a Lavagna para “dar una imagen de amplitud” de cara a 2015, otros (como Peña y el consultor estrella Jaime Durán Barba) advierten que “Pro tiene que ser un proyecto de renovación de la política” .

Cerca de Lavagna, en tanto, se mostraron sorprendidos por las repercusiones de los últimos pasos públicos de su jefe político. “Roberto se juntó con Macri el jueves pasado después de la foto y estaba todo bien. Salió de ahí y corrió a distanciarse, no sabemos por qué”, contó uno de los dirigentes que está al tanto de las negociaciones.

“Tiene ganas de jugar en octubre, con o sin el macrismo”, señaló otro allegado al ex ministro, que recalcó la “buena relación” que une a Lavagna con dos bonaerenses hoy alejados de Macri: Daniel Scioli y Sergio Massa.

Lo curioso es que tanto desde el macrismo como desde el peronismo disidente aseguran que todavía hay tiempo para barajar y dar de nuevo. “Falta mucho. Nadie se jugó todavía ni se lanzó como candidato en Capital. Todavía tenemos tiempo”, aseguraron dos dirigentes de confianza de Macri, que eligió el silencio.ß