Un ingeniero y un carpintero, “mulas” del tráfico internacional
Los sospechosos, un griego y un albanés, fueron detenidos en el aeropuerto con 30 kilogramos de cocaína
Primero cayó un ingeniero en sistemas griego cuando iba a subirse a un avión que lo iba a llevar hasta Amsterdam, en Holanda. Después, fue apresado un carpintero albanés con pasaporte británico cuando planeaba viajar a Roma. Ambos fueron detenidos en el aeropuerto de Ezeiza por detectives de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) con 15 kilos de cocaína cada uno en las valijas. La droga estaba impregnada en la ropa que llevaban en sus equipajes.
Semanas atrás, detectives de la PSA detuvieron en el barrio de Palermo a otro ciudadano albanés acusado de ser la persona que le entregó las valijas con la cocaína a las dos “mulas” detenidas en el aeropuerto internacional de Ezeiza.
Así lo afirmaron a la nacion fuentes con acceso al expediente. El primer caso fue investigado por el juez en lo Penal Económico Ezequiel Berón de Astrada. El segundo hecho ocurrió cuando estaba de turno su par, Rafael Caputo.
“Se logró identificar a la persona que les habría entregado la droga a los dos primeros detenidos. Después de analizar escuchas telefónicas, mensajes de texto y las imágenes aportadas por los hoteles donde estuvieron alojados el ingeniero en sistemas griego y el carpintero albanés”, agregó una fuente con acceso a la investigación.
En las últimas horas, el juez Berón de Astrada ordenó la captura internacional de otro ciudadano extranjero, que podría ser también nacido en Albania. Se sospecha que tenía un rol superior en la organización descubierta por la PSA.
El ciudadano griego, soltero y de 33 años, había llegado a la Argentina seis días antes de su detención. Fue apresado cuando estaba por embarcar en un vuelo de la aerolínea KLM con destino a Amsterdam. Su destino final la ciudad de Atenas, en Grecia.
La droga, según explicaron fuentes de la investigación, fue descubierta cuando la valija del pasajero pasó por la máquina de rayos X. “Los encargados de la Aduana, a cargo del control, observaron por el monitor que en el interior del equipaje había una sustancia orgánica”, agregaron los informantes consultados.
El personal de la Dirección General de Aduanas, dependiente de la Agencia Federal de Ingresos Públicos (AFIP), ubicó al ingeniero griego y, por orden del juez Berón de Astrada, fue trasladado a la Guardia de Prevención de la PSA, donde se abrió la valija.
Había 46 camisetas “blancas”
“Cuando se abrió la valija se descubrió que ocultas dentro de remeras había 46 camisetas blancas que tenían un peso superior al normal y una consistencia acartonada no común en esta clase de indumentaria. Ante esta situación se sometió a una prueba de campo para cocaína, y el resultado dio positivo”, explicó una fuente de la investigación.
Algo similar ocurrió poco tiempo después, cuando fue detenido el carpintero albanés con pasaporte británico, que iba a embarcarse en un vuelo de Alitalia hacia a Roma. Su destino final era la ciudad de Tirana, en Albania.
La droga fue descubierta después de que la valija pasara por la máquina de rayos X y la ayuda de la perra llamada Negra.
A diferencia de lo que sucedió con el ingeniero griego, la droga secuestrada al carpintero albanés estaba impregnada en casi toda la ropa: en 15 camisetas, en 54 remeras, en ocho pantalones y en una musculosa.ß