El “efecto Coqui”, otra vez hunde los cupones
Los cupones del PBI registraron ayer pérdidas del 1 a 8%, profundizando el movimiento que habían comenzado a mostrar en los últimos minutos de la rueda previa, luego de que se supiera que el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, había vuelto a descartar ante el Congreso un posible pago por el crecimiento 2013. Fue cuando ratificó las cifras divulgadas días atrás por el ministro Kicillof, sin aportar mayores detalles.
El “efecto Coqui”, del que tanto se había hablado hace poco más de un año –cuando siendo gobernador pesificó de facto un bono en dólares del Chaco–, deja a la vista una férrea decisión oficial de evitar este egreso, que sólo podría ser quebrada por instrucción judicial, si se comprueba que ante la revisión del PBI corresponde un recálculo a la baja del umbral que activa el pago, como sostiene el ex secretario de Finanzas Guillermo Nielsen.
La defensa oficial del no pago, cuando antes se hacía gala de ello, obedecería a que el Gobierno ya tendría destino para ese “ahorro”. En el mercado se cree que sería un pago cash al Club de París para encaminar el acuerdo.
El grueso del castigo recayó otra vez sobre el cupón en pesos (-8%), simplemente porque es el que más hubiera pagado y es el que tendría la vía legal más complicada. Para el resto fue mucho más leve, por las razones contrapuestas.
La nueva ola de ventas, con epicentro en los cupones, contagió al resto. Hubo toma de ganancias entre las acciones (-1,7% la Bolsa) y nuevas bajas para los bonos en dólares. Sólo cerraron estables o con alzas los bonos en pesos indexados.
Fuera de eso, sorprende la “pesadez” de YPF (-3 por ciento ayer), papel que sube apenas 2% en el año, nueve veces menos que el promedio del Merval.ß