“El packaging puede ayudar a reducir los restos que tiramos”
Ingeniero químico, desarrolló e implementó nuevas tecnologías para áreas tales como el envoltorio de productos frescos
Ingeniero químico y director de Sustentabilidad Global para el negocio de Packaging y Plásticos Especiales de The Dow Chemical Company, Jeff Wooster lleva 44 patentes registradas, entre ellas el desarrollo de nuevas tecnologías para films de polietileno, bolsas de alta resistencia y packaging de productos frescos. De paso por Buenos Aires, en una entrevista con
la nacion aseguró que el packaging también puede salvar alimentos y reducir la cantidad que se desperdicia o tira.
–¿Por qué el packaging de un producto puede ayudar a reducir el desperdicio de alimentos?
–El packaging ayuda porque evita tirar el alimento, protegiéndolo. Al tirar alimento, necesitamos producir más alimentos, eso conlleva usar más tierra, más fertilizantes. Si podemos reducir la cantidad de alimento que se desperdicia, pode- mos preservar más tierra en estado natural, usar menos productos. Y no sobreexplotar los recursos. Muchos informes de origen privado ni siquiera mencionan el valor del packaging como una forma de reducir los residuos alimentarios que se generan. Tenemos que evitar que los alimentos se arruinen desde que se envasan hasta su consumo, lograr que tengan una mayor duración. Si compro algo que tiene un embalaje mejor, es más probable que se mantenga fresco por más tiempo.
–Sin embargo, está instalada la idea de que un alimento no envasado es más sano...
–Las personas piensan y asocian que los productos envasados son productos procesados. El packaging nos permite embalar productos frescos y mantener su frescura por más tiempo sin que ello implique que tenga conservantes o aditivos.
–Y una vez que ese envase está
abierto, ¿qué se recomienda?
–Depende de qué comida sea. El mejor packaging es aquel en el cual ya viene envuelto el producto. Es preferible que el consumidor compre algo ya envasado porque es el de mejor calidad y está preparado para extender la vida útil del producto. Es importante que la persona no abra el embalaje y lo pase a otro.
–¿Cómo se da cuenta el consumidor si el packaging es bueno?
–Asegurarse de que el pack funcione, esto es que proteja al alimento y esté en condiciones de preservarlo en la casa del consumidor hasta que lo consuma. Pero hay otras cosas que pueden buscar, como el logo con el dedo pulgar hacia arriba, que indica que ese pack está hecho con polietileno y que es reciclable.
–Ése sería un primer paso. ¿Cómo concientizar luego el reciclaje en sus casas?
–Éste es un problema no sólo en la Ar- gentina. Lleva tiempo desarrollarlo. Hay que educar a los más chicos, que a su vez van a educar a sus padres.
–Muchas veces los edificios no están preparados para separar la basura e incluso se separa dentro de casa, pero después se saca todo en una misma bolsa...
–En los casos de edificios, lo más fácil sería que pidan un contenedor para separar la basura. Y después decirle al encargado que mantenga la basura que ya fue separada así. El tema es la comunicación.
–¿Qué generación vivirá las consecuencias de este impacto ecológico?
–Creo que ya estamos viendo los efectos. No creo que lleve 10 o 20 años más para poder verlos. Por eso es tan importante hacer tareas de educación. Desde los más chiquitos hasta el nivel universitario, y con todos nuestros socios en la cadena de valor.