LA NACION

Por la crisis en Medio Oriente, la Copa Davis en espera

Por el momento no hay cambios, pero se evalúa una mudanza de sede para el repechaje entre Israel y la Argentina, previsto para septiembre en Tel Aviv; Jaite ya visitó el lugar

- Sebastián Torok LA NACION

La violencia en Medio Oriente no cesa. El conflicto, tras diez días de bombardeos y ataques, no disminuye. Está claro que el deporte, en este caso puntual la serie de Copa Davis entre Israel y la Argentina, prevista para el 12, 13 y 14 de septiembre en Tel Aviv, resulta algo ínfimo en una situación de semejante magnitud. De todos modos, es lógico que por cuestiones de seguridad y organizati­vas, la crisis en esa zona obligue a los involucrad­os directos en el desafío por los playoffs del Grupo Mundial a evaluar si la plaza selecciona­da estará en condicione­s de cobijar el cruce. A 56 días del primer enfrentami­ento en el Nokia Arena, no hay modificaci­ones. Sin embargo, según pudo confirmar La NacioN, la Federación Internacio­nal de Tenis, con sede en Roehampton, Londres, está estudiando diariament­e la situación en Medio Oriente con especialis­tas de seguridad y en las próximas dos semanas se tomará una decisión. Precisamen­te ayer, el comité de urgencia de la Unión Europea de Fútbol (UEFA) anunció la suspensión de todos los partidos de la Liga de Campeones o de la Europa League en Israel “hasta nueva orden”, según consignó la agencia AFP.

En los registros de la ITF no hay cambios de sede de Israel a otro país; todos los partidos de local de ese país se jugaron allí, generalmen­te en el Canada Stadium de Ramat HaSharon. Sí hay seis partidos en los que Israel ganó por walkover (no presentaci­ón), pero porque los países, de forma independie­nte, no enviaron a sus delegacion­es por cuestiones políticas, religiosas o de seguridad. Los casos son de Marruecos (1997), India (1988), Nigeria (1978), Turquía (1975 y 1969), Rhodesia (actualment­e Zimbabwe; 1970) y Hungría (1952). De continuar el conflicto en Medio Oriente, hay dos opciones en estudio aprobadas por reglamento: que Israel ceda la localía a la Argentina (lo menos probable, porque recaudaría mucho menos dinero y además sería el equipo albicelest­e quien selecciona­ría la superficie), o que se juegue en otro país, en una suerte de escenario neutral, que podría ser en Chipre o Grecia. En la Asociación Argentina de Tenis hay preocu- pación y se pusieron en contacto con la ITF; también hay inquietud por las alteracion­es operativas que una mudanza puede involucrar (ya se hicieron las reservas de avión para el cuerpo técnico y los colaborado­res, y de hotelería para toda la delegación).

Martín Jaite, el capitán argentino, visitó Tel Aviv después de estar presente en Roland Garros. Hizo un reconocimi­ento del Nokia Arena, donde actúa el Maccabi Electra, actual campeón de básquetbol europeo: “El estadio es moderno. No tanto como el O2 de Praga (semifinale­s 2013). Lo hicieron en dos etapas y tiene dos anillos de tribunas. El primero lo hicieron al principio y a medida que Maccabi creció, lo agrandaron. Tiene todas las comodidade­s. ¿La superficie? Será una carpeta, me la mostraron, aunque la cancha todavía no está armada; después, hay que ver las capas de pintura y qué velocidad le dan. No son especialis­tas allí, pero considerar­on que nos va a perjudicar. El partido les generó buenas expectativ­as, hace mucho que no juegan de local (abril de 2012). Otros que jugaron allí me dijeron que hay un clima denso, cantan mucho, hacen lío. Pero estamos acostumbra­dos”, expresó Jaite, que se despedirá del cargo luego de tres temporadas.

A fines de agosto, Jaite viajará al US Open y allí terminará de confirmar el equipo. De todos modos, las alternativ­as no son numerosas. Leonardo Mayer, el argentino de mejor rendimient­o en el año, será el primer singlista (además, se adapta con comodidad a las superficie­s duras). Carlos Berlocq sería la segunda raqueta individual. Horacio Zeballos parece estar fijo en el dobles. Y el cuarto titular dependerá de si el capitán decide contar con “un tercer singlista”, que en ese caso podría ser Juan Mónaco, si es que se encuentra en buenas condicione­s físicas, o si escoge a un jugador con antecedent­es coperos en dobles como Eduardo Schwank, más allá de su opaco presente. Federico Delbonis, que todavía no debutó en la Copa Davis, hoy parece tener menos chances de jugar el repechaje. ¿Con qué equipo se encontrará la Argentina? Jaite analizó cada pieza: “Dudi Sela es un jugador bicho, laburador, inteligent­e, que no tiene grandes tiros, pero que en la Davis se agranda. Amir Weintraub es diferente, es más joven (27 contra 29 de Sela), pega fuerte y plano, consiguió triunfos en la Davis contra (Milos) Raonic y (Jerzy) Janowicz. Y el dobles históricam­ente ha funcionado bien, aunque hace bastante que no juegan juntos: Andy Ram, que se está por retirar, y Jonathan Erlich, que también es grande”. Lo deportivo está casi definido; ahora sólo resta tener claridad en lo periférico al match.

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Archivo Postal interior del Nokia Arena, donde se juega básquetbol e Israel quiere recibir a la Argentina por la Davis

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