Control a tiempo de las malezas
En general nos acordamos de las malezas problemáticas justo antes de la siembra o durante el ciclo de los cultivos, cuando en realidad el éxito de su buen manejo comienza a decidirse con anterioridad. Esto lo veo en mi trabajo como gerente del departamento técnico de la empresa A&T y Asociados SA.
El primer paso en la búsqueda del éxito en el control de malezas difíciles es el monitoreo. Eso implica recorrer lote por lote para identificarlas y registrar su nivel de infestación. Este monitoreo se debe realizar durante todo el año, desde el barbecho hasta antes de la cosecha. Una vez conocidas las malezas problema se debe generar un programa de manejo integral. ¿En qué consiste? Por un lado, en un manejo preventivo, que se trata de utilizar semilla limpia y certificada, mantener los alambrados y caminos libres de malezas, realizar la limpieza de maquinaria antes del ingreso al lote y eliminar cualquier planta resistente que quede en el lote evitando que complete su ciclo. Además, en caso de que exista presencia de malezas durante la cosecha, hay que dejar sin trillar los manchones invadidos, postergándolos para el final y realizando la limpieza fuera del lote. Por otra parte, hay que planificar la rotación. El manejo debe hacerse pensando a largo plazo, teniendo una visión que permita la posibilidad de incluir distintos cultivos incluyendo los de cobertura.
En definitiva, la aparición de las malezas difíciles obliga al sistema productivo a terminar con la agricultura basada en el uso indiscriminado de insumos y a revalorizar el factor humano en sus capacidades y competencias.