La izquierda lanza una primaria competitiva para la presidencial
Altamira, del PO, enfrentará a Nicolás del Caño, del PST; el MST no fue aceptado
Unas internas competitivas, pero acotadas. Tal como dictó Cristina Kirchner para ordenar al Frente para la Victoria, ésa parece ser la fórmula del éxito electoral. El mismo camino transitará el Frente de Izquierda y de los Trabajadores (FIT), la fuerza más representativa del espacio, de cara a las PASO.
Jorge Altamira, líder del Partido Obrero (PO), ratificó ayer su precandidatura presidencial. Lo acompañará Juan Carlos Giordano, representante de Izquierda Socialista. Y ya tiene rival: el diputado Nicolás del Caño, referente del Partido Socialista de los Trabajadores (PST), un dirigente de 35 años que supo posicionarse después de lograr un buen resultado electoral en Mendoza, su provincia.
“El objetivo es movilizar. El FIT ya tiene que tener a sus candidatos haciendo campaña en este contexto de crisis que viven los tres principales candidatos. Scioli no está firme porque espera una orden de la Presidenta; Macri no tiene construcción territorial; Massa se está deshilachando”, argumentó Altamira.
El histórico dirigente, de 72 años, buscará en las PASO llegar a su sexta candidatura presidencial. Su último antecedente, también en representación del FIT, fue en 2011, cuando registró el 2,3 por ciento de los votos.
La alianza entre el PO e Izquierda Socialista presentará listas de legisladores propias, aunque no descartan desde ambos sectores negociar una boleta de unidad antes del cierre. “Será una interna entre compañeros. Nosotros no somos los kirchneristas”, dejó claro Altamira. Con la idea de mantener el movimiento proselitista, las agrupaciones organizan un acto para el 29 de mayo en Córdoba, en conmemoración de un nuevo aniversario del Cordobazo.
Desafío joven
El histórico segundo lugar que el FIT logró en las elecciones de la Ciudad de Mendoza a principios de mayo ratificó la intención del PTS de postular al diputado Del Caño como precandidato a presidente del frente. Desde el partido lo destacan como el mejor representante para un espacio político acostumbrado a contar con el apoyo de los sectores jóvenes.
El FIT es la fuerza más asentada de la izquierda en la Argentina con un bloque de tres diputados en el Congreso y representación legislativa en diez provincias. El objetivo para los comicios de 2015 será convertirse en la cuarta fuerza a nivel nacional. Todo un desafío.
“Más que diferencias, tenemos matices que vamos a dirimir en las PASO. Creemos que tenemos que aprovechar esta fusión entre los trabajadores y la juventud que dio tantos buenos resultados en las provincias”, explicó Del Caño.
La atractiva interna generó interés en el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST). Alejandro Bodart, referente del partido, pidió sumarse al frente, pero desde el FIT –en su dos líneas internas– fueron contundentes. “No podemos hacer un acuerdo con quienes no tenemos ninguna coincidencia programática. La gran interna de la izquierda fracasó rotundamente”, rechazó Del Caño.