José Santomé
Pionero de la ciencia local
Héroe desconocido por el gran público, José Santomé fue uno de los pioneros que pusieron los cimientos de la ciencia local. Gracias a sus investigaciones sobre la hormona de crecimiento, realizadas con los doctores Alejandro Paladini y Juan Dellacha, entre otros, fue posible por primera vez en el país el tratamiento de chicos con enanismo hipofisario, una patología que hasta hace menos de medio siglo condenaba a los que la padecían a una existencia de “fenómenos”.
Luego de secuenciar la hormona de crecimiento bovina, Santomé y Dellacha, que fueron grandes amigos durante 53 años, llevaron adelante una verdadera epopeya: sintetizar la hormona de crecimiento humana a partir de hipófisis cadavéricas, un trabajo extenuante. Así, a lo largo de más de quince años, la Facultad de Farmacia y Bioquímica le proporcionó al Centro para el Estudio de Hormonas Hipofisarias (Cehip), que integraron Paladini, Santomé y Dellacha, junto con médicos del Servicio de Endocrinología del Hospital de Niños, las dosis para tratar a alrededor de 70 chicos hasta que se produjo la hormona por biotecnología.
Nacido en Parque Patricios, se graduó de bioquímico en la UBA y durante más de cuarenta años se dedicó al estudio de las proteínas, a la enseñanzadelabioquímicayalaformaciónde decenas de discípulos. Profesor eméritodelaUniversidaddeBuenosAires, fue coordinador del Laboratorio Nacional de Investigación y Servicios en Química de Proteínas (Lanais-PRo), miembro de la Academia Nacional de Farmacia y Bioquímica, de la Academia de Ciencias de Buenos Aires, de la Academia de Ciencias del Mundo en Desarrollo (TWAS), en Trieste, y de la Academia Latinoamericana de Ciencias. Era aficionado a la náutica, a recorrer el país en automóvil y a la observación de pájaros.