La CGT de Moyano se sumó al paro nacional de los transportistas
Lo anunció el líder camionero; la medida tendrá lugar a principios de junio
La CGT liderada por Hugo Moyano respaldó ayer el paro nacional que lanzó esta semana la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) para oponerse a las negociaciones salariales con límites de aumento y por considerar insuficientes las modificaciones al impuesto a las ganancias realizadas por el Gobierno.
“La CGT informa que, ante el creciente malestar que atraviesa la mayoría de los gremios, ha resuelto instrumentar un paro general en todo el país para junio”, se indicó en un comunicado que lleva la firma de Moyano.
Desde la central obrera calificaron además como “inadmisible” que el ministro de Economía, Axel Kicillof, pretenda “limitar salarios apelando al viejo argumento de que las paritarias son la causa de la inflación”.
El apoyo de Moyano es clave para una protesta que se inició con la misma metodología que el último paro nacional, el 31 de marzo. Primero, los transportistas lanzaron una medida sectorial y abrieron una puerta para las adhesiones, que se sumaron después. Fue la huelga de mayor impacto contra Cristina Kirchner.
La propuesta que realizó la CATT esta semana ya había recibido el respaldo de la CGT liderada por Luis Barrionuevo, que unificó sus reclamos con la otra central obrera opositora y ya avanza en la organización. La protesta sería el 3 o el 4 de junio. Sólo restaría definir si el paro será de 24 o de 36 horas. Barrionuevo, además, presiona para que haya una movilización a la Plaza de Mayo.
La medida también fue respaldada ayer por la CTA opositora. El titular de la entidad, Pablo Micheli, pidió que la medida de fuerza sea de 36 horas y con movilización. “El plan de lucha va creciendo porque no hay respuestas. El retoque en el impuesto es un avance mínimo, pero es un avance. Se tiene que discutir la estructura completa del impuesto” a las ganancias, expresó el dirigente gremial en declaraciones a Radio El Mundo.
Todavía resta conocer qué postura tomará la CGT oficialista, liderada por el metalúrgico Antonio Caló. Se especula con que, como sucedió durante el paro del 31 de enero, la central obrera puede no adherirse al paro, pero dar libertad de acción para que los gremios que la componen puedan participar si así lo desean.
Más adhesiones
Alberto Roberti, titular de los Petroleros Privados, aseguró que su gremio, enrolado en la CGT kirchnerista, se sumará al reclamo de junio, aunque aclaró: “Seguramente no de manera orgánica y más todavía con el tema de las paritarias estancadas, seguramente habrá libertad de acción para los muchachos”, expresó en declaraciones a la agencia DyN.
No será la primera vez que sindicatos aliados a la CGT oficialista participan de un paro nacional, como sucedió el 31 de marzo. Algunos adhirieron de manera testimonial, como Luz y Fuerza, Comercio y la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), pero otros paralizaron su actividad, como los petroleros, el gremio de la Alimentación y algunas seccionales de la UOM.
Se estima, además, que las adhesiones para el paro de junio pueden llegar más cerca de la fecha prevista para la protesta, ya que muchos acuerdos paritarios están empantanados por presiones que ejerce el Gobierno.
Ante estos nuevos apoyos, los transportistas ratificaron ayer la medida de fuerza, aunque fueron pesimistas sobre el verdadero efecto que puede generar sobre mejoras concretas. El titular de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, aseguró: “Se viene esta medida de fuerza, pero sabemos que no va a suceder nada, porque [el Gobierno] cree que aguanta un paro más. Pero la gente así se está cansando y esto va a tronar un día. Pareciera que están buscando que esto truene”.