Subió, pero achicó más su base de negocios
La Bolsa porteña cerró ayer con un alza de 1,25%, impulsada por la buena jornada de negocios que tuvieron los mercados en que se referencia, tras una rueda en la que volvió a mostrar otra inquietante reducción en el volumen de negocios con acciones, el que ya se ubica más de un tercio por debajo del nivel que promedió en abril.
El saldo de las operaciones fue de 33 alzas contra 35 bajas (otros 9 papeles finalizaron sin cambios).
Las mejoras de precios, entre las líderes, estuvieron encabezadas por el Banco Macro, que se anotó una suba del 3%, en rueda también positiva para los papeles petroleros (+2,1% Petrobras; +1,1% Tenaris y +0,6%YPF) pese a la baja del 1% que evidenciaron ayer los precios promedio del crudo en el mundo.
Del lado de las bajas hay que mencionar las de Aluar (0,9%) y Siderar (-0,6 por ciento). Frente a la escasa actividad local, la atención de los operadores estuvo centrada en la reacción de Wall Street, plaza en la que el índice S&P marcó un nuevo máximo histórico, estimulada por la oportunidad de negocios que para sus multinacionales supone la renovada debilidad del dólar, que ayer descendió a su nivel más bajo desde enero contra una canasta de monedas de los principales socios comerciales de Estados Unidos pese a conocerse en la jornada una nueva reducción (aunque marginal) en los pedidos de ayuda por desempleo.
El dato no modificó las expectativas del mercado respecto de los pasos que seguirá la Reserva Federal: se cree que el primer ajuste en las tasas no llegará hasta septiembre
Los que volvieron a entregar señales bajistas aquí fueron los bonos en dólares, que parecen haber ingresado en una especie de meseta desde hace más de un mes.