Marcha contra el trabajo esclavo en Flores
Vecinos reclamaron por la muerte de dos niños en un taller ilegal
“Ni cadenas explotadoras ni clausur aspoliciales, abramosl ostalleresal trabajo digno”, es la consigna con la que se convocó ayer a marchar desde el taller de Páez y Terrada, donde murieron a fines del mes pasado los hermanos Rodrigo Menchaca, de 10 años, y Adair Rolando Mur Menchaca, de 5. El punto de llegada fue Luis Viale y Espinosa: ahí, en 2006 en otro incendio en un taller textil, murieron seis personas, cuatro de ellos niños. “Para sacar del gueto a la economía popular migrante, no olvidamos”, dice una de las consignas de las organizaciones sociales y políticas que acompañan a la familia Menchaca.
En la justicia, mientras tanto, se abrieron dos causas que ahora podrían unificarse. El juez de Instrucción porteño Manuel Gorostiaga se declaró incompetente en la causa en la que se investigaba el incendio y la muerte de los dos hermanos. Tanto él como el fiscal consideraron que la tragedia era “consecuencia directa del delito de trata de personas”. Por eso enviaron la causa al juzgado a cargo del juez federal Rodolfo Canicoba Corral, que ya investiga si en esa casona operaba una red de trata.
El abogado de la familia, Nahuel Berguier, confirmó a Infojus Noticias que en la casa había documentación que comprobaba la relación de los trabajadores del taller con un ciudadano coreano, entre ellas, el contrato de locación en el que este hombre funcionaba como locatario. “Preferimos mantener reserva sobre este tema para proteger la investigación”, dijo el letrado.
Ayer, en la Legislatura porteña no prosperó el pedido de citación al jefe de gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, que impulsaban partidos de izquierda. El legislador Marcelo Ramal presentó la iniciativa para citar a Larreta y a “todos los funcionarios implicados en el incendio del taller clandestino de Flores”.