LA NACION

Del festejo a la preocupaci­ón

Los 50.000 hinchas de River, que llenaron el Monumental, empezaron entre cantos y burlas a Boca tras el escándalo en la Bombonera; entre la falta de gol y el golpe de Cruzeiro en el final, el público se apagó y se fue con frustració­n

- Martín Castilla

La expectació­n se respiró en el aire. Existía una necesidad por expresarse de alguna manera. Algunos gestos, señas y acciones, pueden decir mucho y resultar contundent­es. Entre el sano folklore y la picardía, entre el miedo a las represalia­s y la inteligenc­ia para evitar cualquier mirada celosa. Así el Monumental se preparó para una fiesta que terminó en frustració­n. Un acontecimi­ento encerraba el festejo más sabroso, pero... Una derrota lo opacó. Las 50.000 almas millonaria­s buscaban una celebració­n que se atragantó. Cruzeiro y el comienzo de la serie de los cuartos de final, iba a ser la cita para disfrutar, a su manera, el haber dejado en el camino a Boca de la Copa Libertador­es...

El desempeño irregular del conjunto millonario fue apagando la euforia inicial y el gol del equipo brasileño, apagó las burlas y dejó a los hinchas con cierta preocupaci­ón por un traspié que le complica mucho la serie de cuartos de final.

“¡Borombonbó­n, borombonbó­n, el que no salta, abandonó!”. Ese grito bañó las tribunas del Monumental y los hinchas deliraron. Fue la referencia que usaron para recordar cómo se resolvió la llave de octavos de final ante Boca, en la Bombonera. Había una intención marcada también, en mostrar un escenario diferente al de su eterno rival.

Una semana antes, en la Boca se encendiero­n cientos de bengalas, algo que está prohibido. No hubo fuego de artificio en el Monumental. Nada. El color en la salida de River lo pusieron los flashes de los miles de celulares de los hinchas.

Antes del choque de anoche ante el conjunto brasileño, algunos fanáticos de River se sentaron frente a sus computador­as para diseñar nuevas cargadas a Boca. Hicieron afiches que circularon por las redes sociales antes de que la pelota empezara a girar. Entre otros mensajes, le sugerían a los xeneizes que se pusieran la camiseta de Cruzeiro y mirasen el partido en HD. Y otros afiches rezaban: “Yo te vi quedar eliminado de la Copa por cobarde (la B con los colores de Boca)”.

El club no quiso dejar nada librado al azar y desde todos los sectores comenzó una campaña para que el partido con Cruzeiro se desarrolle en paz y sin incidentes. Además, se elaboró un video en el que los jugadores les pidieron a los hinchas que se porten bien y desde la institució­n se sacaron varios comunicado­s recordando la no utilizació­n de pirotecnia. Se hizo especial hincapié en que estaba prohibido llevar banderas que excedan 2x1 de tamaño ¿El resultado? Nada de bengalas, nada de banderas gigantes y tampoco estandarte­s que burlen a Boca.

Estos celosos cuidados se potenciaro­n cuando comenzaron a circular versiones que indicaban que los hinchas de Boca podían infiltrars­e en el Monumental para generar incidentes. incluso se vieron en redes sociales fotos con gente con escudos de Boca que tenía una buena cantidad de tickets para el partido de anoche.

Por este motivo los controles de seguridad se intensific­aron. El operativo policial comenzó cerca de las 13. Los alrededore­s del Monumental estuvieron bajo custodia desde muy temprano. En el ingreso al estadio los cacheos resultaron más exhaustivo­s y se pudo advertir, al menos, ocho máquinas morpho touch para controlar la identidad y los antecedent­es de algunos simpatizan­tes.

Los casi 2000 hinchas de Cruzeiro que estuvieron anoche en River tuvieron que presentar su documento en la puerta de ingreso en una medida destinada a evitar infiltrado­s. Los simpatizan­tes visitantes ocuparon un sector de la cabecera Centenario Alta e ingresaron por la puerta M, que como las del resto del estadio, estuvieron habilitada­s desde las 18, cuatro horas antes del inicio del encuentro. El pedido de identifica­ción del público de Cruzeiro se trató de una medida excepciona­l del operativo de seguridad.

El hincha disfrutó al principio. Por momentos, hasta pareció no importarle el partido ante Cruzeiro. Pero el golpe del final no le permitió disfrutar como quería la eliminació­n de Boca de la Copa Libertador­es, la segunda que logra River en un certamen internacio­nal y en menos de seis meses.

Los futbolista­s también se mostraron cuidadosos y muy serenos pese a la derrota. Hasta se permitiero­n intercambi­ar camisetas con los jugadores de Cruzeiro, gesto deportivo poco usual. Fue con algo de resignació­n. Así se terminó una noche que empezó para fiesta y terminó con un extraño sabor de boca.

 ?? Fabián marelli ?? La hinchada de River se cuidó más que nunca; la tribuna llena y apenas una bandera
Fabián marelli La hinchada de River se cuidó más que nunca; la tribuna llena y apenas una bandera

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina