Investigan el rol de las escuelas en la prevención
La Fundación Nano encontró un 6% de miopía en los alumnos
En un trabajo publicado en la revista Perspectives in Public Health, Richard Hobday plantea que aunque las causas de la miopía escolar son elusivas, merecería estudiarse en profundidad si altos niveles de luz solar en las aulas pueden ayudar a prevenirla.
“Hace un siglo (...) se construían escuelas con grandes ventanas para que los chicos no se volvieran cortos de vista –escribe Hobday–. Esta práctica continuó hasta alrededor de los años sesenta, cuando se impuso la creencia de que la miopía era un trastorno heredado. (...) investigaciones recientes sugieren enfáticamente que la cantidad de luz que los chicos reciben mientras crecen determinará si se vuelven miopes; pero faltan evidencias. Dado el rápido crecimiento de este trastorno en todo el mundo, esto debería investigarse.”
aunque a veces los errores refractivos (miopía, hipermetropía y astigmatismo) son soslayados, la agencia internacional para la Prevención de la ceguera (iaPB, según sus siglas en inglés) calculó en 2004 que la prevalencia de discapacidad visual por esta causa en mayores de cinco años afecta a entre 123 y 184 millones de personas, entre los cuales ocho millones son no videntes. Según esta estimación, los errores refractivos no corregidos son la segunda causa de ceguera.
De allí la importancia de campañas como “a ver qué ves” (creado en 2003 por los ministerios de Salud y Educación de la ciudad), del consejo argentino de oftalmología, de sociedades oftalmológicas provinciales y de organizaciones civiles, como la Fundación nano, que desde hace casi veinte años viene realizando un activo tamizaje para detectar a los chicos con problemas y proveerles anteojos.
“llevamos controlados entre 600.000 y 700.000 chicos de la provincia de Buenos aires –cuenta María Eugenia nano, antropóloga y directora de la fundación–. no tenemos trabajos publicados en revistas indexadas, pero según nuestros registros alrededor de un 6% de la matrícula escolar primaria pública de hasta 16 años tiene defectos refractivos.” Julián Gallo, de la Universidad austral, sostiene que los errores de refracción suman entre el 65 y el 70% de las consultas de oftalmología.