AFA, la pesadilla de Mauricio Macri

El fútbol y la política ya no se cruzan. Se fusionan. Una prueba ínfima: de la reunión entre Mauricio Macri y Hugo Moyano, anteayer, participó Claudio Tapia. Y de la bochornosa asamblea de la AFA participó Claudio Tapia. ¿Quién es Tapia, “el Chiqui”? El presidente de Barracas Central, yerno de Moyano y principal puntero de Luis Segura para reelegirse en la AFA.

En la reunión con Macri se dio por sentado que Segura tenía más votos que Tinelli. Pero el presidente electo pidió que se negocie una lista de unidad. Al frente quiere al cordobés Armando Pérez, de Belgrano. Por supuesto, sus deseos son órdenes. Al menos, por un tiempo.

Macri está enfadado por el apoyo de Tinelli a Daniel Scioli. Por eso no intercedió a favor del showman, sino a favor de sí mismo. La división de la AFA es su peor pesadilla. Supone que, frustrada, la facción de Tinelli podría movilizar barras bravas para arruinarle la asunción. Tal vez, Macri sobrestima los vínculos entre Tinelli, Cristóbal López y Cristina Kirchner. Por eso teme.