LA NACION

Evalúan beneficiar a los arrepentid­os que brinden informació­n sobre corrupción

El Gobierno enviará al Congreso un proyecto para casos como los de la ruta del dinero K

- Laura Serra

El Gobierno se apresta a remitir al Congreso un proyecto de ley que introduce en el Código Penal la figura del arrepentid­o en los delitos de corrupción. El debate legislativ­o de esta iniciativa, que irá acompañado de una propuesta para decomisar los bienes producidos por estos hechos ilícitos, se produce en momentos en que afloran nuevas revelacion­es sobre los presuntos negocios espurios de los empresario­s kirchneris­tas Cristóbal López y Lázaro Báez con el anterior gobierno de Cristina Kirchner.

Ambas iniciativa­s son el adelanto de un paquete más amplio de leyes contra el fraude que elabora la oficina Anticorrup­ción ( oA), dirigida por Laura Alonso. La funcionari­a, no obstante, aclaró a la nacion que este primer envío al Congreso no se hace por las recientes denuncias que reactivaro­n la causa sobre la “ruta del dinero K” que involucra a Báez y a su hijo Martín. “Éste es un pedido expreso del presidente Mauricio Macri el día que asumió. Creemos que será una herramient­a eficaz que ayudará a los jueces a agi- lizar la investigac­ión sobre delitos de corrupción”, indicó Alonso.

En la actualidad, la figura del arrepentid­o está contemplad­a en las leyes que sancionan el narcotráfi­co, el terrorismo y la trata de personas. No está prevista para los delitos perpetrado­s contra la administra­ción pública. La oA pretende cubrir este vacío con la aplicación de la figura del arrepentid­o para los delitos de cohecho y tráfico de influencia­s, malversaci­ón de caudales públicos, negociacio­nes incompatib­les con el ejercicio de funciones públicas, exacciones ilegales y enriquecim­iento ilícito de funcionari­os y empleados. También están incluidos los delitos de prevaricat­o y denegación y retardo de justicia por parte de los jueces.

Esta iniciativa irá en paralelo con la elaborada por el Ministerio de Seguridad, que conduce Patricia Bullrich, que introduce la figura del arrepentid­o para casos de crimen organizado. Este proyecto, que forma parte de un programa integral de lucha contra la insegurida­d, como anticipó la nación, se presentará la semana próxima.

Por su parte, el proyecto que elaboró la oA propone disminuir o eximir la pena de aquel imputado que proporcion­e informació­n “útil, precisa y comprobabl­e” que evite la consumació­n o continuaci­ón de un delito o la perpetraci­ón de otro; que permita esclarecer una inves- tigación en curso o que revele la identidad de coautores, partícipes o encubridor­es de los hechos investigad­os. La disminució­n de la pena, según establece el proyecto, sería en un tercio del mínimo y la mitad del máximo de la pena en cuestión.

La iniciativa dispone, no obstante, que no podrán ser beneficiar­ios de esta reducción de pena los jefes, fundadores, cabecillas o dirigentes principale­s de organizaci­ones criminales, así como los funcionari­os sujetos a la remoción por juicio político, es decir, el Presidente y los jueces de la Corte Suprema.

El encargado de determinar la eventual reducción o eximición de la pena al colaborado­r en una causa judicial es el Ministerio Público. De haber un acuerdo entre ambos, éste será sometido al juez o al tribunal para su aprobación y control. Asimismo, el proyecto oficial establece que los “arrepentid­os” podrán efectuar sus denuncias mediante reserva de identidad, domicilio, profesión y lugar de trabajo, al tiempo que estarán alcanzados por las disposicio­nes del Programa Nacional de Protección a Testigos, vigente por ley.

Para otorgar los beneficios contemplad­os en este proyecto, se deberá considerar el grado de la informació­n y su eficacia para la investigac­ión, la proporcion­alidad, y la oportunida­d en que se ha dispuesto la colaboraci­ón. También se tendrá en cuenta si el colaborado­r fuese el primero en aportar informació­n sobre el caso investigad­o.

El debate de esta ley promete ser intenso en el Congreso, máxime tras el escándalo político que provocó la reciente difusión de imágenes captadas en la financiera SGI, conocida como La Rosadita, en las que se ve al hijo de Báez contando millones de dólares.

“Yo puedo decir muchas cosas porque sé muchas cosas”, dijo el financista Federico Elaskar, quien era dueño de La Rosadita y está imputado por lavado de dinero en la causa sobre la ruta de dinero K. Elaskar dijo que si hubiese una ley del arrepentid­o en el país, él y “mucha gente” podrían aportar elementos para que esto se aclare.

En varios países de la región la figura del arrepentid­o permitió desentraña­r causas de corrupción, como en Brasil con el mensalão, donde existía un esquema de sobornos mensuales a legislador­es de la oposición para apoyar proyectos oficiales, y con el petrolão, una gigantesca red de corrupción en la compañía estatal Petrobras.

“La complejida­d de los delitos de corrupción requiere la incorporac­ión de la figura del « arrepentid­o » con el objeto de lograr una mayor eficiencia en la prevención y en el combate de la corrupción”, señaló en un reciente informe Poder Ciudadano.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina