Conocer para enfrentar el dengue
Se recomienda realizar monitoreos con estrategias de control efectivas
En la lucha contra el dengue, con más de 15 años de experiencia en el tema de control de vectores desde el área de la dirección de Higiene Ambiental de Basf, creemos que no sólo es necesario aplicar los insecticidas de manera correcta y estratégica, sino que, además, y quizás más importante, es indispensable concientizar a la sociedad y ofrecer regularmente capacitaciones sobre cómo actuar para controlar al mosquito desde el aporte individual.
El desarrollo del Aedes en un área específicamente rural es poco frecuente, pero no se puede descartar porque el insecto ya colonizó vastas áreas de la tierra.
Todo depende del lugar en que se encuentre localizada la vivienda rural, ya que es muy diferente si está en un área muy cercana a centros poblados de provincias epidémicas como Misiones y Formosa o si se encuentra próximo a una localidad del sur de la provin- cia de Buenos Aires, sitios en los que el virus quizás aún no está circulando.
El ciclo del Aedes se hace más visible a partir del comienzo de la primavera, cuando los primeros adultos se aparean y depositan centenas de huevos en recipientes con o sin agua en sitios cercanos a la actividad humana.
Así las poblaciones crecen con el aumento de las temperaturas primaverales y estivales y con lluvias frecuentes.
Monitoreos
La primavera temprana es la época indicada para realizar los primeros monitoreos larvarios a través del Índice de Bretau ( IB). Para ello se realizan muestreos en las viviendas del lugar contando la cantidad de recipientes que tienen larvas de Aedes.
Con un IB mayor al 10% ya podemos indicar que hay riesgo de brote de la enfermedad. Luego, todo dependerá de la presencia de enfermos de dengue importados en esa localidad para aumentar el riesgo.
La población tiene que mantener su casa limpia y eliminar los recipientes móviles inservibles contribuyendo con el denominado “método de descacharrado”, porque la hembra también ve un lugar sin agua como un posible criadero.
Por otro lado, nunca hay que dejar de observar al mosquito ya que está presente durante todo el año. Los huevos pueden permanecer imperceptibles al ojo humano durante varios meses soportando aún las sequías.
De igual modo, a la salida del invierno es el momento en que hay que atacar ya que es mucho más preventivo. Las poblaciones son menores y el adulto está mucho más susceptible al programa.
Un acercamiento muy efectivo para capacitar a la sociedad es la creación de talleres en las escuelas, ya que los niños aprenden jugando y así les transmiten sus conocimientos a sus padres, abuelos y hermanos.
Tanto los larvicidas como los insecticidas residuales o de volteo que se encuentran disponibles en el mercado son diferentes, por lo tanto, es indispensable la capacitación para aplicarlos de manera efectiva.
Un error en la estrategia o la ejecución puede determinar que la acción sea nula y, en consecuencia, que los mosquitos continúen su desarrollo y se exponga a la población a un riesgo sanitario grave.
En síntesis, para realizar un control efectivo del mosquito no sólo debemos aplicar insecticidas de manera segura y estratégica sino que también es fundamental trabajar mancomunadamente entre la población, ONG, instituciones, medios de comunicación y Estado. Esto para tener un diagnóstico preciso, real y luego construir un programa integral de control profesional y articulado.