Las apps de movilidad urbana
El incremento del parque automotor hace que todas las ciudades del mundo tengan problemas de movilidad; de ahí, las políticas para desalentar el uso del automóvil en ellas. Un reciente informe del Observatorio Vial Latinoamericano ( Ovilam) agrega una nueva solución para paliar este problema, que se suma a las conocidas hasta ahora, como ampliar la infraestructura ( que no siempre es posible, además de ser muy costosa y de construcción prolongada), mejorar el transporte público y promover el uso de la bicicleta, entre las más salientes.
Según ese informe, las plataformas tecnológicas o apps, las más conocidas son Uber y Lyft, “vinculan a conductores ( asociados a alguna de estas empresas) que se encuentran en zonas determinadas de la ciudad con potenciales usuarios necesitados de moverse dentro de la misma ( todo a través de la aplicación en los celulares)”. Además de las ciudades europeas y norteamericanas que utilizan estos servicios, en América latina ya funcionan en Ciudad de México, Bogotá, Santiago y Montevideo.
En México, dice el informe, estas apps tienen 750.000 usuarios y un marco legal para operar, mientras que en Santiago hay 100.000 usuarios y 10.000 conductores ( sólo de Uber, la más grande de estas empresas, con servicios en 200 ciudades de 53 países). El 55% de los usuarios en la capital chilena solicitan el servicio para ir a trabajar, lo que reduce considerablemente la cantidad de autos que entran diariamente a la ciudad. Un 70% de los usuarios afirma también que lo prefiere por seguridad personal.
Se especula que estos servicios están en vías de estudio para ser lanzados en nuestro país, donde no hay ningún marco legal específico que los ampare. Se sabe también que, en casi todas las ciudades, la resistencia de los taxis tradicionales – que los consideran una competencia desleal– ha sido y es muy grande.
Más allá de todo esto, no cabe duda de que estas plataformas constituyen un nuevo medio de movilidad y transporte que, más temprano que tarde, estarán en el centro de la polémica y del debate en nuestro país, por sus variadas aristas en pro y en contra.