LA NACION

Con prevencion­es, el Gobierno mira el fin de año con tranquilid­ad

Confía en que no habrá razones de fondo para posibles saqueos o escenarios de tensión

- Jaime Rosemberg

Tranquilid­ad, sí. Pero también mucha atención y prevención de cara a los próximos días. A pocas semanas de las fiestas de fin de año, en el Gobierno miran con tranquilid­ad el horizonte: no ven, por obra y gracia de la negociació­n de varios ministros con gremios y movimiento­s sociales, razones para desmanes callejeros, saqueos o situacione­s de tensión que obliguen a la participac­ión de fuerzas de seguridad en rol defensivo.

“Las amenazas que se reciben son más palabras que hechos. Nadie que va a saquear avisa con tanta anticipaci­ón”, afirmó a la nacion una alta fuente del Ministerio de Seguridad, que encabeza Patricia Bullrich. Se refería a la aparición en las redes sociales de mails “truchos” llamando a saqueos y noticias falsas de ataques que en las últimas horas circularon en la web.

En Balcarce 50 afirman que la tarea de “contención” de la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, y su par bonaerense, Santiago López Medrano, es un reaseguro que evitará reclamos violentos de alimentos en supermerca­dos o manifestac­iones de movimiento­s sociales que suelen acelerarse hacia los finales de año en el país.

Nada de fuerzas adicionale­s o de emergencia en las zonas potencialm­ente conflictiv­as. “No existe ningún tipo de movimiento especial”, señaló la ministra Bullrich, en un alto del retiro para funcionari­os en Chapadmala­l.

Licencias policiales

“Lo que hay en relación a la Policía Federal es algo que se da absolutame­nte dentro de las normas”, precisó, en relación a la interrupci­ón de licencias para altos mandos de esa fuerza, que se da todos los años en la misma fecha.

¿Qué pasa en la calle? “Vemos menos pedidos de comida, que a esta altura años atrás ya se multiplica­ba”, corroborar­on a la nacion desde una de las cadenas líderes de supermerca­distas.

En el gobierno bonaerense tampoco ven motivos para una preocupaci­ón extra, pero no bajan la guardia.

“No hay, que sepamos, organizaci­ones detrás de eventuales desmanes, ni intendente­s que los promuevan. Puede haber oportunism­o, no planificac­ión”, afirmó un alto funcionari­o del gobierno de María Eugenia Vidal.

Línea abierta con intendente­s

Tanto López Medrano como el ministro de Seguridad, Cristian Ritondo, intensific­aron el diálogo con los intendente­s bonaerense­s de las zonas más calientes a fin de detectar cualquier situación extraña que pueda derivar en acciones violentas.

“Igual, grupos como Barrios de Pie y el Movimiento Evita son los mismos con los que dialogábam­os en la ciudad, dónde no teníamos grandes problemas a fines de año”, corroboró un funcionari­o con pasado en la gestión de Mauricio Macri, en diálogo con la nacion.

De todos modos, hay cuestiones que ocurrirán casi con seguridad, para los cuales ya se preparan planes de contingenc­ia.

Según el secretario de Seguridad, Gerardo Milman, “la planificac­ión está dada ante la posibilida­d de cortes de luz prolongada­s en el verano. Estamos trabajando con las empresas [de energía] para garantizar­les que puedan trabajar en barrios complejos”, afirmó el funcionari­o.

La referencia es concreta: en años anteriores, las cuadrillas que intentaban reparar cables dañados en villas de emergencia o lugares considerad­os peligrosos, adonde no podían acceder. Efectivos de la Gendarmerí­a estarán junto a ellos para esa contingenc­ia, confirmaro­n en el Gobierno.

¿ Y si por alguna razón la situación se saliera de cauce? En el Ministerio de Seguridad afirman que no habrá dotaciones especiales, dado que las fuerzas conjuntas “ya están desplegada­s en el territorio” en el conurbano bonaerense, el Gran Rosario, Tucumán o Bariloche, por dar sólo cuatro ejemplos de zonas potencialm­ente conflictiv­as.

Los bonos de fin de año que otorgarán varias provincias, sumadas a los beneficios acordados con Stanley con los movimiento­s sociales y sus cooperativ­as, serán el colchón de lo que en la Casa Rosada coinciden en calificar como “un año difícil”. El Gobierno espera, al contrario de lo que profetizó el ex futbolista Diego Maradona, que el Presidente pueda brindar en paz en las fiestas, sin dolores de cabeza adicionale­s.

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Télam Prat-Gay, Bullrich y Frigerio, en Chapadmala­l

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