Rosario: buscan revivir el Parque Independencia
Se espera que la puesta en valor del espacio mejore la cotización de las propiedades aledañas
En los años ochenta, el compositor rosarino Lalo de los Santos, uno de los integrantes de la recordada nueva trova de aquella ciudad, hizo tararear a muchos jóvenes una canción que decía así: “Rosario es el Parque Independencia,/ un silencio que huele a poesía/ sobre el Rosedal,/ es el gris del cemento que arrulla/ a un río somnoliento/ que despierta al llegar un domingo/ de Newell´s y Central.”
Y no era para menos. Hablar de Rosario es hablar del Parque Independencia, de sus añosa arboleda, de sus distintos verdes, de sus lagos y sus fuentes. Ese fue uno de los parques que soñó y proyectó a lo largo de todo el país el paisajista Carlos Thays, hace ya más de 115 años. Poco a poco el Parque de la Independencia que cuenta con 126 hectáreas, una suerte de Rosedal palermitano fue ganando protagonismo hasta convertirse en un ícono rosarino que , sin duda, se encuentra instalado en la memoria colectiva de la ciudad. En él se levanta el estadio del Club Atlético Newell’s Old Boys y desemboca el tradicional Boulevard Oroño, uno de los rincones más coquetos y pintorescos de la ciudad, que albergó durante muchos años a las familias patricias de ese sector del país que vivían en casonas y palacetes.
Dada la importancia de este espacio verde el gobierno rosarino realizó intervención, refacción y reconversión integral del Parque Independencia ubicado en una ciudad que en los últimos 10 años sumó cerca de 445.000 metros cuadrados según estimaciones privadas. La mayoría de ellos concentrados en unidades de uno y dos ambientes.
El plan de reconversión del parque se basa en tres ejes, primero, la puesta en valor del patrimonio es decir, el arreglo de elementos paisajísticos, escultóricos y edilicios. Recuperación de espacios e inclusión de nuevas áreas verdes y la absorción de zonas marginales habilitándolas para el esparcimiento.
Entre las restauraciones más destacadas se encuentran las del Rosedal, donde se sembrarán 7500 rosas de 37 especies, césped, 612 especies herbáceas y de arbustos e instalarán sistema de riego; la de la fuente de los españoles, una pieza donada por la colectividad ibérica en 1936 y el sector de la ex Sociedad Rural, donde se demolerán los muros perimetrales y se ganarán cuatro hectáreas para el uso público.
La idea es preservar los edificios históricos como pabellones y tribunas y desarrollar allí, un predio de convenciones mediante la articulación público-privada.
“No hay un monto total de inversión porque es un trabajo integral, pero, acciones como la del Rosedal implican un presupuesto oficial de $ 3.500.000; la reconversión lumínica con 126 luminarias LEDs, $ 2, 3 millones y la recuperación de la fuente de los españoles, una pieza de un alto valor patrimonial cuya restauración es compleja en términos técnicos y que tardará como mínimo un año y medio con una inversión de $ 7 millones”, detalla Pablo Hernán Ábalos, secretario de Planeamiento de la Municipalidad de Rosario. El funcionario agrega que están llamando a licitación para las concesiones del ex predio Rural que tendría una inversión cercana a los US$ 50 millones. “Buscamos concesionar varios espacios, donde el privado asume la inversión propia y se convienen las mejoras y el mantenimiento de sectores”, agrega.
El segundo eje denominado Paseo 21, busca promover contenidos actuales de uso. “Estamos terminando de desmantelar algunos juegos para transformar el ex parque de diversiones en la plaza de las ciencias. Con la ayuda de la Universidad de Rosario generamos actividades para facilitar a los jóvenes su estadía en el parque. Habrá nuevos componentes, dinámicos y motivadores para ellos e infraestructuras que tengan que ver con la música y las expresiones corporales”, afirma Ábalos. El último eje es, la plataforma deportiva que unirá los espacios como el patinódromo y el estadio municipal con otros que se proyectan en el futuro, relacionados con la práctica deportiva. En la actualidad, el Parque Independencia tiene 126 hectáreas y es abierto, en su mayor parte. En 2017 las obras estarán en ejecución, pero los trabajos de recuperación son a largo plazo. El mantenimiento estará a cargo del municipio con la participación del sector privado. “El Parque Independencia está en un lugar estratégico, en el acceso y el cruce de las dos principales avenidas que arman el centro: el boulevard Oroño y la avenida Pellegrini. Su trazado es el principal valor patrimonial y tuvo una lógica de uso que definió la traza de la ciudad”, concluyó Ábalos.
Esta puesta en valor urbana sirvió para que el mercado reviera las tasaciones de los inmuebles del centro. Una buena noticia para los vecinos de una ciudad que según la Cámara de Empresas Inmobiliarias tiene una demanda insatisfecha de viviendas para la clase media que podría alcanzar a las 40.000 unidades nuevas.