Ex poderosos que buscan el bajo perfil y transitan por la Justicia

Refugiados en cargos menores, aún deben dar cuentas de su paso por el gobierno nacional

RÍO GALLEGOS (De nuestra corresponsal).– Fueron intocables, influyentes y poderosos. Pasaron 12 años conociendo los secretos del poder. Entraban en la Casa Rosada sin presentación. Ahora la elite kirchnerista reubicada en Santa Cruz atiende la conflictiva realidad provincial y, en algunos casos, sus complicadas situaciones judiciales.

Uno es el caso de la ministra de Salud, Rocío García –pareja de Máximo Kirchner–, investigada ahora en su rol de coordinadora Regional del Centro Articulador de Políticas Sanitarias, con competencia directa en el programa Argentina Sonríe. El fiscal federal Eduardo Taiano analiza si ella y otros funcionarios cometieron serias irregularidades, como el pago de sobreprecios o de insumos de baja calidad y desvío de fondos.

Angelina Abbona es otra ex poderosa funcionaria nacional que recaló en Santa Cruz. En las últimas horas se conoció su renuncia al cargo de fiscal de Estado, aunque aún no hay confirmación oficial. Abbona fue procesada y embargada por su rol al frente de la procuraduría del Tesoro, por no denunciar e impulsar acciones penales contra el grupo español Marsans. También se investiga su rol en la protección de información sobre transacciones millonarias vinculadas a Báez y los Kirchner.

Quienes litigaron este año contra ella aseguran que no se sentía cómoda en un cargo menor, después de haber estado tantos años en el candelero político y, haber acompañado a los Kirchner en temas sensibles por más de dos décadas.

Mejor suerte tuvo Carlos zannini, hoy vocal por el Poder Ejecutivo en el directorio del Banco Santa Cruz: obtuvo su jubilación provincial en la Caja de Previsión de Santa Cruz. El hombre que le cuidó doce años la firma a Néstor y Cristina Kirchner no está involucrado en ninguna causa judicial.

Sin embargo, su pasar no es tan tranquilo en Río Gallegos. El banco fue uno de los lugares mas allanados en las distintas causas judiciales que rodean a los Kirchner y a Báez. Además, pese a moverse con discreción, sufrió un escrache en un supermercado y en un vuelo.

otro caso es el de Daniel Cameron. El hombre que por una década tomó las decisiones en materia energética en el país reapareció asesorando al gobierno de la provincia sobre las represas hidroeléctricas. En los últimos meses su nombre volvió al candelero al reflotarse la causa Skanska, en el que se investiga el supuesto pago de sobornos de la empresa sueca a funcionarios para adjudicarse la ampliación de dos gasoductos en los primeros años de la gestión kirchnerista.

También hay “pingüinos” por adopción, como el ex diputado Horacio Pietragalla, que estuvo al frente del Archivo Nacional de la Memoria. Es uno de los nietos recuperados por las Abuelas de Plaza de Mayo y hoy ocupa en Santa Cruz la Secretaría de Derechos Humanos.

Un caso similar es el de la abogada Graciana Peñafort Colombi, nombrada asesora letrada notarial del gobierno en la órbita de la Fiscalía de Estado, a través del decreto 233/16, publicado en el Boletín oficial. Trabajó en el área de Asuntos Legales y Normativas del Afsca y es coautora de la ley de medios. Y el año pasado fue directora de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Defensa de la Nación.