Mannix: “No jugamos para ser terceros. Queremos ganar”
Conforme a medias, el patrón de Alegría cree que “es difícil formar un equipo mejor que éste”
Alegría tiene dos polistas de 10 goles, muy talentosos, y un súper experimentado de gran currículum en la Argentina. Pero el que toma las decisiones es su jugador extranjero y de menor handicap, porque Frederick Mannix es el dueño del club de la hoja de arce. Y el canadiense quedó satisfecho a medias al cabo de un 2016 en el que, con 37 de valorización, su equipo era el tercero de la Triple Corona con aspiraciones a tumbar, al menos una vez, a alguno de los de arriba. Al segundo específicamente, Ellerstina, con el que se enfrentó en Tortugas, en Hurlingham y en Palermo.
“Fue una temporada de altibajos para Alegría. Llegamos a las tres semifinales, pero no cumplimos nuestro objetivo de alcanzar una final. Les ganamos a los equipos a los que teníamos que vencer”, evaluó Mannix, de 32 años. “No jugamos para ser terceros. Ni siquiera para ser segundos. Queremos ganar. Cumplimos el objetivo de las tres semifinales, pero hicimos el mínimo. No cumplimos con nuestro potencial”, sentenció el polista de Calgary.
Piensa que Ellerstina superó a su conjunto en la semifinal del Argentino (“estuvimos preparándonos todo el año para este partido”) porque jugó mejor en los últimos chukkers, con caballos superiores y más frescos. “Lo que tenemos que hacer es montarnos mejor”, concluyó Mannix, que terminó exhausto por la alta temperatura, como los caballos. Y abrió al análisis con miras al futuro: “El equipo debe funcionar en un alto nivel. Pero hay muy pocos jugadores que pueden ajustarse a este equipo. Pensaremos qué haremos y cada uno es libre de tomar sus decisiones. Es difícil hacer un equipo mejor con los jugadores disponibles en este momento. Hilario [Ulloa] y Sapo [Caset] tienen 10 goles, Lucas [Monteverde] ganó cuatro veces el Abierto y es 9 goles... Es difícil formar un equipo mejor que éste”, razonó el patrón, que lleva varias temporadas junto a Ulloa y Monterverde.
Al propio delantero le quedó una “sensación amarga” por el encuentro de ayer y por la temporada. “Jugamos excelentemente los primeros cinco chukkers, como para ganar el partido. Y tuvimos dos chukkers muy malos en lo que se sentía que ellos tenían resto, y nosotros... Perdimos un par de caballos antes de Palermo y otro par durante el torneo; tal vez habrían sido esa cuota de oxígeno que nos faltaba. En el final ellos fueron muy superiores”, admitió Hilario. Que agregó: “Teníamos equipo y habíamos tomado funcionamiento como para hacer algo más. Hicimos lo que el handicap obligaba: estar en las tres semifinales y darle pelea a Ellerstina. Pero no nos conformamos con eso. Queríamos estar por lo menos en una final, y no lo logramos”.