Una alternativa que ordena el negocio
Apostar a un proyecto “verde” exige trabajar con indicadores que incentivan a documentar procesos; las experiencias
La opción sustentable no implica sacrificar el lujo de la estadía lejos de casa. Don Puerto Bemberg, en Misiones, muestra que las ideas modernas conviven muy bien con la tradición. El reciclado de la antigua hostería perteneciente a la tradicional familia Bemberg ofrece un espacio en contacto con la naturaleza con criterios sostenibles. En el 2008, el casco de principios de siglo XX fue reciclado manteniendo su estilo colonial, y a través de tecnologías adecuadas como bombas de agua, equipos de refrigeración e iluminación led, se logró reducir en un 50 por ciento el consumo de energía eléctrica. Juan Manuel Zorraquín, anfitrión del hotel, explica que el monitoreo para medir el consumo de agua y energía fue crucial para mejorar la gestión de los recursos. “Creo que la sustentabilidad va a ser una condición a futuro de todos los hoteles. Hoy con los costos energéticos es muy redituable invertir en energías alternativas y eficiencia energética. Esto hace más competitivos los emprendimientos a futuro y mejora los costos”, dice el anfitrión de Don Bemberg.
La sustentabilidad se apoya en tres pilares: ambiental, económico y social. Hay que estar preparados en todos los frentes. Las condiciones de empleo como el cuidado de los recursos, y las certificaciones como el programa de Rainforest Alliance –en el que el hotel está desde el 2012– cumplen para Zorraquín un rol muy importante a la hora de establecer criterios y hacerlos cumplir. Además, destaca que al trabajar con muchos indicadores, son grany des aliados en el negocio porque incentivan a documentar muchos procesos y ayudan a ordenar.
Construir conciencia es otra forma de aportar y el hotel trabaja en esta línea a través de actividades de ecoturismo. Su programa de reforestación invita a los huéspedes a plantar un árbol y dentro de las excursiones que realizan trabajan con la interpretación de la selva a través de caminatas con guías especializados. Además, el hotel cuenta con programas de capa citación para que los jóvenes para que puedan ingresar al mercado laboral, realizan jornadas de educación ambiental para las escuelas del pueblo, universidades y otras instituciones.
Una cuestión de principios
Para Pablo Bontempi propietario y gerente de Calma Nono, en Traslasierra en Córdoba, la sustentabilidad es una cuestión de principios. Por eso, pensó en cada detalle a la hora de construir este hotel boutique en medio de la sierra. El diseño y la implantación se dio en función de la vegetación y para construir optó por materiales de la zona como madera y piedra. Hoy Calma Nono cuenta con paneles solares, sistema de tratamiento de aguas grises mediante una planta 100 por ciento ecológica, hogares de alto rendimiento y de combustión lenta. Además, se implementa una gestión de los residuos y compostaje y se utilizan productos biodegradables y productos orgánicos como jabones de mano hechos en la zona con productos orgánicos no abrasivos.
Bontempi explica que los sistemas sustentables requieren un gasto de inversión alto y una atención y mantenimiento constantes. En su caso, trabajó por etapas para afrontar los costos e ir incorporando nuevos sistemas que permitieran seguir trabajando en pos de la sustentabilidad. El cambio en los comportamientos es fundamental: “Es necesario generar conciencia en los huéspedes para que cuiden los recursos, porque si no se educa para esto las tecnologías no tienen tanto sentido. Me gusta que la gente se lleve además una enseñanza”, dice. El nuevo desafío es un sistema de recupero de aguas de ciclo cerrado para la reutilización de las aguas grises mediante diferentes procesos ecológicos.
La vida en las ciudades puede ser vertiginosa. Por suerte hay proyectos que trabajan cuidando el medio ambiente. Desde la empresa AADESA -gerenciadora de hoteles como Cyan en Recoleta, o Wyndham Nordelta- aplican criterios que permiten obtener una mayor eficiencia energética y gestionar los recursos cuidando el medio ambiente en todos sus hoteles.
Arturo Navarro CEO de AADESA explica que trabajan con criterios sustentables para cuidar el medio ambiente pero también para proteger a los grupos de interés y ahorrar costos de operación. Si bien la inversión inicial es superior, el ahorro que se da luego en forma directa y como comunidad hace que valga la pena el esfuerzo. G.K.