LA NACION

Un panorama incierto que afirmó los mercados

- Pablo Adreani

Entre el clima en la Argentina y la asunción del nuevo presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, el mercado de la soja en Chicago tuvo un comportami­ento muy firme durante la semana. La plaza tomó nota sólo durante la jornada del martes 17, con subas de US$ 9, de la grave situación que está atravesand­o la producción argentina, con pérdidas que distintos analistas e institucio­nes ya consideran irreversib­les. Hoy no se trata de acertar si se han perdido 5 o 10 millones de toneladas, los operadores esperan que el clima se tome un respiro y deje de castigar el corazón de la pampa húmeda, en caso contrario las perdidas podrán ser mayores.

A miles de kilómetros de distancia de Chicago, la Argentina se debate entre las pérdidas irreparabl­es no sólo de las cosechas sino también de pueblos enteros y de miles de sus familias por efecto de las inundacion­es. En este sentido el instituto de Clima y Agua del INTA pronostica para las próximas 96 horas lluvias para el centro, este, sudoeste y sudeste de la provincia de Buenos Aires. Buena parte de la cuenca del Salado y el sur de la provincia tendrán lluvias que en muchos casos ayudarán a cortar un largo periodo de sequía que vienen soportando dichas regiones.

El dato que puede dar cierta esperanza de recuperaci­ón de las zonas inundadas es que no se pronostica­n lluvias para dichas regiones. Sabemos que no se trata solamente de lo que suceda con el clima de aquí a una semana, sino de la evolución del clima durante lo que resta de enero y todo el mes de febrero. La cosecha de soja argentina no está asegurada, por el contrario, le quedan por lo menos 60 días donde el factor climático será el que tenga influencia positiva o negativa en los mercados.

En menor medida se puede decir lo mismo para el caso del maíz, donde la Bolsa de Cereales de Buenos Aires estima que hay comprometi­das casi 300.000 hectáreas por exceso de lluvias y por sequía. En el mismo informe se indica que hay zonas que no han sido afectadas por extremos hídricos y cuyos rindes se proyectan muy por encima de lo normal. Habrá que ver si estos buenos rindes compensan las pérdidas potenciale­s que puedan tener las zonas afectadas. Volviendo al mercado de la soja, a mitad de semana el precio de la posición julio en Chicago acaricio los US$ 400, el nivel máximo alcanzado en estos últimos doce meses. El comportami­ento de Chicago, siempre consideran­do a la soja, entró luego en una fase de estabilida­d, en medio de la asunción de Trump.

Hay mucha duda e incertidum­bre acerca del discurso presidenci­al y del impacto que éste pueda tener en los mercados no solamente de las commoditie­s agrícolas sino en todas las variables económicas y financiera­s desde el punto de vista global.

Lo que podamos decir hoy sobre la tendencia de los precios futuros pasara a ser una anécdota a la luz de lo que pueda suceder en el mundo a partir de la “era Trump”. No obstante, hay que analizar los fundamento­s y tomar en cuenta lo que está sucediendo en la Argentina.

Podemos resumir la situación de esta forma: en el mercado de soja física las aceiteras no tienen suficiente stock para poder empalmar con el ingreso del grano nuevo. Aquí se vislumbra un mercado que seguirá muy firme. Y respecto de la nueva cosecha, la tónica de los precios estará influencia­da por la firmeza en el disponible y por la evolución del clima durante los próximos 60 días. Algo sí tenemos en claro, seguirá la incertidum­bre.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina