Disciplinas antigimnasio: cuanto más raras, mejor
Spinning bajo el agua, Yoga sobre tablas de surf, Pole Dance masculino o Brookling Fitboxing ganan adeptos con la promesa de evitar el aburrimiento
A la distancia, la ciudad de Buenos Aires aparenta calma. Aquí, los únicos sonidos que enmarcan esta mañana de sábado son los del agua del Río de la Plata que mece suavemente las tablas de Stand Up Paddle Surfing (SUP)sobre las cuales un grupo de mujeres realiza posturas de yoga. Stand Up Yoga o Yoga SUP es el nombre de una nueva disciplina que se practica tanto al aire libre como indoors, y que atrae a personas que buscan sacar provecho de la relajación del yoga y del trabajo corporal del SUP.
“Iba al gimnasio, salía a correr, a caminar, pero me aburría porque no encontraba una actividad que al mismo tiempo me divirtiera, me permitiera tener contacto con la naturaleza y cumpliera con mi necesidad de moverme”, cuenta Ingrid Rivera, licenciada en psicología y vecina de Martínez, provincia de Buenos Aires, que desde hace unos meses se acerca a Spirit Kite Beach, en Alvear y el río, donde la instructora Karina Spina da sus clases de Yoga SUP.
Esta forma de yoga que se practica sobre tablas de surf (más precisamente, sobre las voluminosas y más estables tablas de Paddle Surfing) es una de las nuevas disciplinas que hoy renuevan el interés de aquellos que buscan una actividad para ejercitarse y que encuentran nuevas alternativas a clásicos como el running o los fierros.
La lista es larga, incluye esa combinación de ballet, yoga y pilates llamada Fit Barre, la adopción del Pole Dance por parte del público masculino, el Brooklyn Fitboxing que mixtura box, artes marciales y entrenamiento funcional, la práctica de spinnnig bajo el agua, o las rutinas de entrenamiento que hacen hincapié en el contraste entre secuencias de alta intensidad y breves descansos.
La constante renovación de la oferta de disciplinas de entrenamiento, cada vez más extravagantes, responde a varias causas. “Por un lado, el conocimiento y la investigación sobre el entrenamiento y el fitness van evolucionando, lo que lleva al desarrollo de nuevos formatos. De esta manera, surgen tendencias y herramientas en el mundo del fitness –explica Esteban Dietz, licenciado en actividad física y entrenador de Chicas en Rollers, festival de bienestar que se realizará el 9 de abril en Alcorta y Monroe, Belgrano–. Al mismo tiempo, la industria necesita ofrecer nuevas modalidades para que las personas no se aburran. A veces, además de incorporar nuevas disciplinas, se reciclan entrenamientos tradicionales con nuevos formatos o con otros nombres”.
Daniel Tangona, entrenador personal y autor de Las excusas engordan (Grijalbo), coincide: “La industria crea nuevas técnicas para que la gente crea, se ilusione y sea seducida por esa novedad; para que tome el hábito de moverse. El ser humano necesita cambios permanentes ya que cada vez se aburre mas rápido”, dice, y agrega que además de las disciplinas que son realmente novedosas “hay unas 500 con distintos nombres pero con la misma característica”.
La novedad, lo distinto, atrae. Gonzalo Calcagno, de 31 años, reconoce que nunca hizo deporte – “ni correr, ni jugar a la pelota, ni nada”– porque le aburre la rutina, pero se tentó con el Pole Dance cuando una amiga lo invitó a anotarse juntos. “Le dije que sí como chiste, pero fui a la primera clase y la verdad que me divirtió”, cuenta.