El FPV da por segura la candidatura de Cristina y busca evitar las PASO
El kirchnerismo asegura que irá por el Senado y evalúa cómo evitar una interna con Randazzo
La decisión política está tomada. Cristina Kirchner va a ser candidata a senadora por la provincia de Buenos Aires sin atravesar una competencia interna en las PASO. En eso coinciden la gran mayoría de dirigentes que rodean a la ex presidenta, en línea con las declaraciones que hizo anteayer el intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, uno de los más cercanos a Cristina. Sólo algunos, los más cautelosos, advierten que la decisión sólo será definitiva cuando ella haga el anuncio.
¿Cómo hará para eludir el desafío electoral que le planteó Florencio Randazzo? “Hasta el último día vamos a hacer todos los esfuerzos para convencerlos de conformar una lista de unidad”, responden los intendentes bonaerenses y referentes de peso del kirchnerismo. Traducción: todavía el plan A es lograr que el ex ministro de Transporte deponga sus aspiraciones y acepte la decisión de la mayoría.
¿Y qué pasa si, como hizo hasta ahora, Randazzo rechaza compartir una lista con Cristina? En ese caso, terminó de definirse en las últimas horas, el kirchnerismo pondrá en práctica un mecanismo jurídico para evitar la disputa interna. Los apoderados del PJ y de las fuerzas que integraron el Frente para la Victoria (FPV) barajan tres opciones. La definición se conocería el miércoles que viene, fecha fijada para la inscripción de los frentes electorales.
“Lo que está claro es que ella no va a competir en las PASO”, dijeron a la nacion distintas fuentes del armado cristinista. El argumento es el mismo que dio la ex presidenta en su última aparición pública: no es aceptable desgastarse en una disputa interna porque hay que dedicar la campaña a confrontar con Mauricio Macri. “Si Randazzo no acepta la unidad, que juegue por su cuenta”, concluyó un intendente de la primera sección.
Para transmitir ese mensaje, el presidente del PJ bonaerense, Fernando Espinoza, se reunió anteayer con Julián Domínguez, uno de los dirigentes que impulsan la postulación de Randazzo. Ambos tienen mucha confianza. Pero no se pusieron de acuerdo.
El primero de los planes que se analizan, el que cuenta con más adeptos por estas horas, es que el PJ bonaerense, hoy controlado por el ala kirchnerista, se excluya de las próximas elecciones. La idea encuentra su antecedente en 2003: el partido nacional dio un paso al costado y otorgó libertad de acción. En esos comicios presidenciales compitieron por fuera del PJ Carlos Menem, Néstor Kirchner y Adolfo Rodríguez Saá.
En esa hipótesis, Cristina sería candidata de un frente conformado por las agrupaciones que solían ser parte del FPV. Las más importantes son Nuevo Encuentro, Miles, Kolina y el Partido de la Victoria. Sin la posibilidad de postularse por el PJ, Randazzo debería anotar su propio frente.
La segunda opción, la más sencilla, es la conformación de un frente de agrupaciones cristinistas que deje afuera al PJ. Se parece bastante a lo que hizo Pro en la ciudad de Buenos Aires para evitar que Martín Lousteau diera la competencia interna en Cambiemos. En ese caso, la ex presidenta sería candidata de un frente sin el PJ y Randazzo quedaría en condiciones de usar el sello del partido, un escenario parecido al de 2005, cuando Cristina compitió contra “Chiche” Duhalde, candidata oficial del PJ. Esta posibilidad no convence del todo a los intendentes.
La tercera opción sería integrar un frente con el PJ adentro, pero bloquear la postulación de Randazzo por medio de la junta electoral de la alianza, de mayoría kirchnerista. Ese cuerpo fijaría requisitos de cumplimiento imposible para Randazzo, con el fin de dejarlo afuera. El riesgo de esta posibilidad, que está casi descartada, es que la discusión se judicialice y que la justicia electoral termine favoreciendo al ex ministro. “Hay que esperar. Todavía falta una eternidad”, insisten en el kirchnerismo, confiados en que Randazzo finalmente ceda ante la presión.