Departamento
A favor
Los amenities permiten contrarrestar el gris de la ciudad. Los primeros proyectos surgieron a fines de la década del 70. Tienen desde cerco perimetral, vigilancia, piscina, SUM, desde canchas de tenis hasta de squash, lavadero de autos y vestuarios para el personal de servicio. Aunque cueste mantenerlos y después se usen poco, ellos son la atracción infalible. Vivir en la ciudad tiene como principal ventaja tener todo “a mano”: el quiosco, el mini-mercado, el gimnasio y la posibilidad de moverse en transporte público o taxis en cualquier horario. “Cuando por trabajo o placer uno tiene una vida social activa, resulta difícil pensar en dejar atrás ese estilo de vida. No tener que recurrir siempre al automóvil para trasladarse es una ventaja que no se negocia”, dice Federico Campodónico (40). La revalorización de la propiedad es otro de los puntos a favor sobre todo para quienes se animan a invertir en zonas que aún no están desarrolladas. En estos casos, las unidades pueden incrementarse más de 20 por ciento en pocos años.
En contra
A diferencia de una casa, el propietario paga también por los espacios comunes como los pasillos y la vivienda del portero. En cuanto a las expensas, los amenities pueden incrementar el valor unos $ 2000. De todas formas, vale aclarar que cuantas más unidades hay, los costos de mantenimiento disminuyen.