Baja de trasplantes
Respecto de la nota “Preocupante baja de trasplantes”, cabe reflexionar sobre las causas de uno más de los tantos temas argentinos en los que los problemas se agravan por falta de organización. Lo primero es que se mezclan las procuras de órganos con la de los tejidos, y en ambas somos ineficientes. Para la donación de órganos es menester que el donante sea a corazón batiente (muerte encefálica). En cambio, en la mayoría de los casos de los tejidos humanos es viable que el donante fallezca por paro cardiovascular. Los tejidos oculares se obtienen por el Incucai y el Cucaiba, en especial en los casos de muerte encefálica en las terapias intensivas. El estado deficiente de estos tejidos genera un increíble incremento de la tasa de descarte, cercana al 50% (de las mayores del mundo). Se procura poco y mal. Por año fallecen varios cientos de miles de personas, y con la procura eficiente de sólo un año eliminaríamos las tortuosas listas de espera por tejidos. Por ejemplo, los tejidos oculares: en la provincia de Buenos Aires tenemos un banco de ojos en La Plata para 17 millones de habitantes; en los Estados Unidos existe un banco de tejidos oculares cada 300 mil habitantes. Muchos años de espera lleva a que se traigan córneas del exterior para realizar los injertos a aquellos pacientes que puedan costearlas (sólo se pagan unos 1200 dólares por gastos de envío), pero la mayoría de los pacientes, de escasos recursos, tienen que esperar años.
Deberíamos regular y legislar de manera diferenciada las situaciones que son distintas. Una vez hecho esto organizarnos como Estado y como sociedad para resolver ambos problemas de la manera más eficiente, y así solucionar definitivamente este grave problema de la salud pública. Dr. Hugo Dionisio Nano DNI 5.556.278