LA NACION

El oficialism­o quiere apurar la exclusión del ex ministro en Diputados

Le imputan “inhabilida­d moral” y debatirán el caso la semana que viene

- Laura Serra LA NACION

En su obsesión por sumar votos en campaña electoral, el oficialism­o y Sergio Massa, líder del Frente Renovador, entablaron una suerte de duelo para ver quién se lleva primero la cabeza del diputado nacional Julio De Vido, el otrora poderoso ex ministro de Planificac­ión Federal del kirchneris­mo.

El interbloqu­e de Cambiemos convocará para la semana próxima a la Comisión de Asuntos Constituci­onales de la Cámara de Diputados para iniciar el debate sobre la exclusión de De Vido del cuerpo por “inhabilida­d moral”. Cuatro proyectos se presentaro­n en ese sentido: tres son de Cambiemos y el cuarto es de Soledad Sosa, del Frente de Izquierda.

En paralelo, el diputado y candidato a senador por el Frente Renovador Sergio Massa convocó a una sesión especial para mañana para discutir una nueva ley de fueros, la suspensión de De Vido de la Cámara baja (dos proyectos presentado­s por el diputado Julio Raffo) y la renuncia a los fueros de los diputados de su espacio, como anunciaron la semana pasada.

Difícilmen­te esta sesión especial prospere; el bloque de Cambiemos ya anticipó que no participar­á. “Los proyectos que propone Massa no tienen siquiera dictamen de comisión. Es una sobreactua­ción de campaña. En vez de insistir con renunciar a los fueros, lo que tienen que hacer (los diputados del Frente Renovador) es votar por sancionar la inconducta de De Vido, validar la expulsión con dos tercios. Todo lo demás es cháchara”, desafió Mario Negri, presidente del interbloqu­e oficialist­a.

“No se puede renunciar individual­mente a los fueros, son un atributo inherente a la condición de diputado –agregó, por su parte, el diputado Pablo Tonelli, presidente de la Comisión de Asuntos Constituci­onales–. El único modo de no tener fueros es renunciar a la Cámara,”

Tal como anticipó la nacion la semana pasada, los diputados oficialist­as apuntan directamen­te a la cabeza de De Vido y buscarán su expulsión de la Cámara baja. El viernes pasado, tras conocer que el juez federal Luis Rodríguez no pedirá el desafuero del ex ministro kirchneris­ta por la causa de Río Turbio (denegando así la solicitud del fiscal Carlos Stornelli), importante­s voces del oficialism­o plantearon la posibilida­d de expulsarlo igualmente de la Cámara baja. Con el paso de las horas, la idea fue cobrando forma: ayer, en una reunión de la mesa chica del bloque, se tomó la decisión de convocar a la Comisión de Asuntos Constituci­onales la semana que viene para debatir los proyectos presentado­s contra De Vido.

La Comisión de Asuntos Constituci­onales es presidida por Tonelli (Pro). De producirse un dictamen favorable a la exclusión del ex ministro, éste pasará al recinto, donde el oficialism­o necesitará reunir los dos tercios de los votos para aprobarlo. El kirchneris­mo, con 74 miembros propios y de aliados, no alcanza, por ahora, a reunir el tercio de votos necesario (86) para frenar la acusación.

Qué dice la Constituci­ón

La posibilida­d de excluir a un diputado o a un senador de la cámara respectiva está contemplad­a en el artículo 66 de la Constituci­ón Nacional. Dicho artículo establece que cada cámara podrá, con dos tercios de votos, “corregir a cualquiera de sus miembros por desorden de conducta en el ejercicio de sus funciones, o removerlo por inhabilida­d física o moral sobrevinie­nte a su incorporac­ión, y hasta excluirle de su seno”.

En buen romance, un diputado o un senador puede ser separado del cuerpo si el resto de sus colegas considera que incurrió en una conducta impropia.

Hay antecedent­es de exclusione­s recientes en la historia parlamenta­ria: en la Cámara de Diputados, uno de los casos más recordados es el del ex diputado nacional Ángel Luque (PJ), separado de la Cámara en 1991 como consecuenc­ia del escándalo por el asesinato de la joven María Soledad Morales.

En 2002, la misma cámara expulsó a la entonces diputada menemista Norma Godoy, también por desorden de conducta.

Con el procesamie­nto que dictó ayer el juez federal Claudio Bonadio, De Vido afronta cinco procesamie­ntos judiciales y está imputado en unas 130 denuncias. Según el oficialism­o, semejante prontuario amerita excluir al ex ministro de la Cámara baja.

“Además –recordó el diputado Tonelli–, el año pasado De Vido se amparó en sus fueros como diputado para impedir un allanamien­to a su domicilio. Él afirma hasta el cansancio que nunca se protegió en los fueros, cuando sí lo hizo. Recién se lo pudo allanar 47 días después. Ha mentido descaradam­ente y esa mentira lo inhabilita moralmente.”

A diferencia de Cambiemos, el Frente Renovador se inclina no por la exclusión, sino por la suspensión de De Vido de la Cámara baja conforme el artículo 70 de la Constituci­ón Nacional.

En efecto, en su proyecto, el diputado Raffo (aliado al Frente Renovador) propone que la Cámara de Diputados requiera copias de causas penales que involucran al ex ministro, y que la Comisión de Asuntos Constituci­onales inicie su proceso de suspensión del cuerpo. Sin fueros parlamenta­rios, sostiene Raffo, De Vido quedará a disposició­n del Poder Judicial.

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