Una fiscal de lazos con el kirchnerismo y con la procuradora

COMODORO RIVADAVIA.– Con reconocidos y consolidados vínculos con el kirchnerismo, Silvina Alejandra Ávila, la fiscal federal subrogante que accedió a recaratular la causa de Santiago Maldonado como “desaparición forzada”, construyó su carrera profesional en esta ciudad entre la docencia universitaria y la administración pública, antes de dar su salto al Poder Judicial.

Fue docente en la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco, secretaria de Medio Ambiente de la municipalidad local y se desempeñó como secretaria del fiscal Norberto Bellver.

Tiene un fluido vínculo con la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó. Sin embargo, en su carrera cultivó un bajo perfil que levantó recién entre 2003 y 2007, cuando se desempeñó al frente del área de Ambiente durante la gestión del ex intendente Raúl Simoncini. Residente en Kilómetro 5, un barrio de la zona norte de Comodoro Rivadavia que nació como un campamento petrolero, Ávila estudió en Buenos Aires y, tras su regreso, se desempeñó como docente en Ciencias Económicas.

Tras ser secretaria del fiscal Bellver, en 2014 se trasladó a subrogar ese cargo en Esquel. La primera en el orden de mérito fue María Virginia Miguel Carmona, que nunca asumió, pues Gils Carbó la trasladó a La Rioja para casos de lesa humanidad. Ávila ocupó entonces la fiscalía de Esquel.

Actualmente, junto a Silvina Ávila en la fiscalía federal de Esquel se encuentra como secretaria Rafaella Riccono, pareja del juez federal Guido Otranto, a cargo de la causa Maldonado.

Hace cuatro días, Ávila retomó contacto con Gils Carbó. Según la fiscalía, tras ese encuentro, la procuradora Gils Carbó se comprometió a reforzar el equipo de trabajo de la fiscalía “con la incorporación de cuatro funcionarios y empleados, y ampliar el espacio físico donde funciona la fiscalía”.