De modelo a dirigir las comunicaciones de la Casa Blanca
Una amiga de Ivanka Trump, de 28 años, quedó confirmada en el cargo
WASHINGTON.– Hope Hicks tiene 28 años, un pasado como modelo, experiencia en la empresa de su amiga Ivanka Trump y, ahora, está al mando de uno de los sectores más sensibles de la administración del presidente republicano: la comunicación.
Luego de su asunción interina para hacerse cargo de la Dirección de Comunicación de la Casa Blanca, tras la polémico salida de Anthony Scaramucci, la joven nacida el 21 de octubre de 1988 en Greenwich (Connecticut) fue confirmada en un puesto clave del gobierno de Donald Trump.
Esta millennial de pelo castaño y de ojos celestes, que fue jefa de prensa del equipo de campaña electoral, trabajó como modelo de la agencia Ford, participó junto a su hermana en una campaña para Ralph Lauren y fue relacionista pública de la firma de moda de Ivanka, la hija mayor del presidente. Quienes conocen más sobre el clan Trump señalan que es muy cercana a la familia y que tuvo la astucia suficiente como para sobrevivir a los altibajos de los meses del magnate en el poder.
Hicks se especializó en inglés en la Universidad Metodista del Sur de Dallas, donde fue la estrella deportiva de su camada. Como directora de comunicación, trabajará codo a codo con Sara Huckabee, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, que asumió después de la renuncia de Sean Spicer.
A pesar de su corta experiencia en la función pública, Hicks también está involucrada en el Rusiagate, el escándalo de espionaje que involucra al Kremlin como una pieza clave para la llegada de Trump al gobierno. El fiscal especial estadounidense que investiga el caso, Robert Mueller, ya le avisó que podría ser interrogada en cualquier momento.
Según lo publicado por la cadena CBS, Hicks, la tercera en asumir el cargo en lo que va de la presidencia del magnate, admitió meses
atrás que sabía muy poco de política antes de ser convocada por la familia Trump.
Ganará 179.700 dólares por año (casi 15.000 mensuales), lo que la posiciona como una de las seis mujeres mejores pagas del gobierno norteamericano.
“Si no me hubiera involucrado en la campaña, seguro todavía estaría trabajando en la Organización Trump. Son una familia tan maravillosa y construyeron una compañía increíble. Fue un honor para mí servirles de diferentes maneras”, ha comentado Hicks en el pasado. Trump la llama cariñosamente “Hopester”.
Hicks será la encargada de todos los aspectos de las comunicaciones de la Casa Blanca, lo que se desgrana en idear una estrategia para promover la agenda de Trump en los medios, organizar discursos, conferencias de prensa y declaraciones para que el mensaje del mandatario sea difundido con fuerza y coherencia.
Además, desde su oficina en el ala oeste de la Casa Blanca estará a cargo de las redes sociales del presidente, conocido por sus descargos polémicos sin supervisión y en cualquier horario.