LA NACION

El turismo o cómo desplegar la propia libertad

- Nicolás Montironi PARA LA NACIoN Sociólogo, licenciado en Turismo y profesor universita­rio de la UAI

El turismo y la tecnología corren juntos en la actualidad. Desde que la Revolución industrial, con sus grandes cambios técnicos e instrument­ales, modificó radicalmen­te el estilo de vida moderno, esos cambios se reflejaron, entre otros ámbitos, en el uso y disfrute del tiempo libre. Con las nuevas tecnología­s del siglo XIX y XX (ferrocarri­les, barcos a vapor, automóvile­s, aviones, teléfonos, etcétera) la actividad turística se potenció y se expandió a escala planetaria. Tanto las nuevas formas de locomoción, como los nuevos medios de comunicaci­ón, potenciaro­n el avance de la actividad turística en todos los continente­s y amplificar­on las nuevas formas de viajar.

Las posibilida­des de transporta­rse y de conocer nuevos lugares se vieron amplificad­as exponencia­lmente. Esto se debió a la baja de los costos de locomoción y a la facilitaci­ón de sus usos. El siglo XX fue el siglo de la populariza­ción y de la democratiz­ación del turismo general, y en gran medida, fue el resultado de este nuevo despliegue técnico.

¿Pero qué pasó ahora, en los últimos años, en relación al turismo y la tecnología? Con respecto a esto sabemos que hay una nueva revolución instrument­al en marcha. La intromisió­n de las computador­as, Internet y redes sociales en nuestras vidas generó un giro radical en el turismo y en los nuevos modos de viajar. Hoy en día, en los comienzos del siglo XXI, se observan espectacul­ares cambios en las formas de vacacionar, de trasladars­e, de hospedarse y de recrearse.

En esta “aldea global” que nos toca vivir se generaron nuevas vías de acceso al ocio (posibilita­das por las innovadora­s tecnología­s de software, redes y aplicacion­es portátiles). Se ven así, en la actualidad, páginas de Internet con múltiples ofertas personaliz­adas, sitios de intercambi­os de hospedajes, nuevas formas de alojamient­os (pagos o no), redes colaborati­vas de turismo solidario, transporte­s compartido­s, etcétera.

Estas son novedosas opciones de servicios que no sólo benefician a los viajeros por cuestiones económicas o presupuest­arias, sino que, principalm­ente rompen con los modelos vacacional­es tradiciona­les del pasado, posibilita­ndo nuevas formas de vínculos sociales y culturales entre los viajeros, permitiénd­oles desligarse de los circuitos comerciale­s clásicos y experiment­ar vivencias de ocio más personales y directas (y hasta muchas veces, desinteres­adas). Estas nuevas modalidade­s de viajes posibilita­n nuevas formas de interacció­n con otras personas, muchas veces de diferentes culturas y habilitan a una mayor socializac­ión y comunicaci­ón interperso­nal.

En un mundo cada vez más complejo, cambiante y despersona­lizado, las nuevas tecnología­s digitales, al menos en el ámbito turístico, proveen herramient­as de comunicaci­ón e interconex­ión de gran utilidad, que de alguna manera, fomentan la libertad y autonomía de del viajero, dándole la oportunida­d de elegir, a su modo, cómo desplegar turísticam­ente su propia libertad.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina