SE EXPANDE EL DÉFICIT CON BRASIL.
A pesar del crecimiento de las exportaciones al vecino país, el rojo aumenta y podría superar los US$ 7000 millones al cierre del año
La balanza comercial del país continúa siendo deficitaria y esta vez el Ministerio de Industria, Comercio Exterior y Servicios de Brasil, el socio comercial más importante de la Argentina dentro del Mercosur, destaca de acuerdo con sus datos que el saldo comercial arrojó un déficit en contra de la Argentina de 745 millones de dólares en el décimo mes del año.
Las importaciones desde Brasil tuvieron un incremento del 52% interanual, a pesar de que hubo una expansión significativa de las ventas argentinas con una suba del 21% interanual.
Según el informe, en los primeros diez meses se acumula un déficit bilateral de 6637 millones de dólares, “producto de unas exportaciones que crecen 7,8% en el acumulado del año contra unas importaciones que se expanden al 31% en ese plazo”, destacó la consultora Abeceb.
Mientras que Brasil se beneficia de un fuerte diferencial entre inversión y consumo respecto de la producción doméstica de nuestro país, en el país vecino la recuperación de la actividad transita un camino sinuoso para situarse en un magro 0,7% hacia final de 2017, con un aumento de la actividad industrial.
“Así, la producción de vehículos en Brasil registra una suba del 40%, más tendiente a generar un proceso inverso, en donde la producción brasileña no absorbida por el mercado interno se vuelca a sus principales socios, como la Argentina. Con compras por 871 millones de dólares, nuestro país fue su tercer comprador en octubre. Esta dinámica dispar se irá mitigando a medida que el repunte en Brasil sea más generalizado, empezando a demandar insumos externos”, añade Abeceb.
Los productos involucrados
En octubre, las exportaciones a Brasil totalizaron 871 millones de dólares, creciendo un 21,1% interanual, y acumulan 7855 millones en el año, 7,8% por encima del mismo periodo del año pasado. Sin embargo, las ventas al gigante del sur siguen 33% por debajo comparando con el mismo período de 2015 y muy lejos de los récords históricos, dando cuenta de que queda mucho potencial por explorar. Los rubros más dinámicos en las exportaciones a Brasil en lo que va del año son los relacionados con la industria automotriz (neumáticos, autopartes, motores, vehículos de carga y transporte), polímeros plásticos y trigo, a los que se les suman en la segunda mitad del año filetes de pescado congelado –en línea con la expansión del sector pesca en la Argentina–, carne congelada y aceite de girasol.
El mes de octubre también re- gistró importantes ventas de la industria química (de escaso rendimiento en lo que va del año), como preparados catalíticos e hidróxido de sodio.
En tanto, luego de registrar una desaceleración en la creciente tendencia importadora brasileña, en el mismo mes las compras a ese país comenzaron a dinamizarse: se importó un total de 1616 millones de dólares, registrándose un aumento de 52,6% interanual.
Sin encontrar su techo, las importaciones brasileñas “se evidencian en el mercado local con automóviles, vehículos de carga, tractores, autopartes y motos”, destaca la consultora Ecolatina.
Y añade: “Del mismo modo, están creciendo con fuerza las importaciones de Brasil de laminados y manufacturas de hierro, insumos difundidos para la producción manufacturera y la construcción. De esta manera, mientras que las exportaciones de Brasil al Mercosur crecieron 30% i.a. en octubre, las ventas de Brasil a nuestro país casi duplicaron dicho ritmo de crecimiento”.
Con esto, el déficit comercial bilateral fue de 6637 millones de dólares, haciendo cada vez más probable que el rojo comercial con el país vecino supere ampliamente los 7000 millones de dólares al cierre del año.
Por último, el flujo de comercio bilateral con el principal socio comercial del país alcanzó los 2487 millones de dólares en octubre de 2017. Esto implica un incremento de 17% respecto del mismo mes del año pasado.