Burzaco dijo que les pagó a Messi y a Angelici
Dijo que le dio al capitán del seleccionado “US$ 200.000” y que lo repartía con otros integrantes del plantel; aclaró que era un adicional a lo que les abonaba la AFA; también habló de sumas para Angelici y Boca; negó pagos a Macri, Aníbal Fernández y Cri
fifagate. Señaló que les dio US$ 200.000 a jugadores de la selección y otros montos a Boca.
Burzaco dijo que “a Messi y sus compañeros” les pagaba un adicional para jugar amistosos: US$ 200.000
NUEVA YORK.– Alejandro Burzaco reveló que Torneos y Competencias pagó a Lionel Messi y a otras figuras de la selección 200.000 dólares para que jugaran partidos amistosos. El dinero estaba dirigido a Messi, principal estrella del equipo, quien lo repartía con otros jugadores del seleccionado. Burzaco no dijo quiénes.
La selección y Messi irrumpieron, ayer, en el tribunal de Brooklyn donde Burzaco testificó por tercer día consecutivo en el juicio por el escándalo de corrupción del FIFAgate. El ex ejecutivo respondió preguntas de dos abogados defensores: John Pappalardo, abogado de Juan Ángel Napout ( ex presidente de la Conmebol), y Bruce Udolf, representante de Manuel Burga ( ex presidente de la Federación Peruana de Fútbol). El fiscal Sam Nitze había cerrado su interrogatorio en la jornada anterior.
Hubo otro clima. A la defensiva, Burzaco fue más elusivo que al responder preguntas de Nitze, y varias líneas interrogatorias de los aboga- dos dejaron dudas y detalles difusos, sin aclarar.
Pappalardo trajo a Messi al tocar el programa Fútbol Para Todos. Repasó una lista de nombres con la misma pregunta: si Burzaco le había pagado sobornos o no. La lista incluyó a Aníbal Fernández, Pablo Paladino y Jorge Delhon, Cristina Kirchner, Pedro Pompilio, Jorge Angelici, el presidente, Mauricio Macri, y Messi.
“¿ Quién es Pablo Paladino?”, preguntó en un momento el abogado.
“Era el coordinador general de Fútbol Para Todos”, respondió Burzaco.
“Usted le pagó al señor Paladino, ¿ no es cierto?”, continuó el letrado. “Si, señor”, respondió Burzaco. Cuando llegó el turno de Angelici, Burzaco respondió: “Le pagamos a Boca distintos pagos durante un período de tiempo”. No aclaró si era para Angelici, o por qué era el pago, o cuánto o cómo pagó. Pappalardo no le preguntó. Cuando llegó la pregunta para Macri, Burzaco respondió que no le había pagado nada.
“¿ Está seguro de eso, señor Bur- zaco?”, insistió Pappalardo.
“Si, señor”, fue la respuesta. Dio la misma respuesta sobre Cristina Kirchner y Aníbal Fernández.
“¿ Quién es Leo Messi?”, siguió el abogado. Por primera vez, el nombre de la máxima estrella argentina irrumpía en el juicio de corrupción más grande en la historia del fútbol. Burzaco dijo algo obvio para cualquier argentino, pero ignoto para muchos en la sala: Messi era “la mejor estrella” del fútbol argentino. “¿ Uno de los mejores?”, preguntó Pappalardo. “El mejor”, dijo Burzaco.
“¿ Le pagó a él y a otros jugadores nacionales?”, interrogó el abogado.
“Sí, señor. A él y a otros jugadores, sí”, dijo Burzaco. Luego, ante una repregunta, llegó la explicación: “Torneos pagaba 200.000 dólares por partido amistoso para que ellos jugaran como un pago adicional. Ya les pagaba la AFA”.
Otra vez, Pappalardo siguió sin despejar dudas. Burzaco no aclaró cuánto pagó a los jugadores, o cómo, o si era en blanco o en negro.
Ya en el otro interrogatorio, de Udolf, Burzaco dejó otro dato: durante su tiempo como jefe de Torneos, pagó coimas por 160 millones de dólares a 30 personas. Nadie cobró más dinero que Julio Grondona, puntualizó.
Ninguno de los dos abogados logró quebrarlo o hacerlo tambalear. Burzaco incluso se dio el lujo de so
brar un par de veces a Udolf. Una y otra vez, recurrió al mismo mecanismo para dormir el interrogatorio: “¿ Puede repetir la pregunta, por favor?”, fue la muletilla. Udolf le dijo que había repetido 44 veces esa pregunta. Burzaco le dijo simplemente que no entendía las preguntas.
“Si no me entiende, usted me lo va a decir, ¿ cierto?”, le preguntó, con un dejo de ironía, Udolf. “¿ Puede repetir la pregunta, por favor?”, contestó Burzaco. Las carcajadas recorrieron la sala.
Un rato después, Udolf le dijo si pensaba que su éxito empresarial se debía a que se había alineado con la gente correcta. Burzaco se dio otro espacio para el humor: “El hecho de que esté acá, parece que me estaba alineando con la gente equivocada”.