LA REINA DEL INDIE, CAMINO AL OSCAR
En Lady Bird, que se estrena pasado mañana, la actriz se sumergió para su ópera prima como directora en una historia autorreferencial de una adolescente y sus obsesiones
en 2008 Greta Gerwig fue al festival de Cine de mar del Plata acompañando a su amigo barry Jenkins a la presentación de su ópera prima,
Medicine for Melancholy. según ella misma cuenta en un podcast, en esa época en la que trabajaba como actriz en el circuito del cine independiente norteamericano tenía poco dinero y la oportunidad de vivir unos días gratis en un festival no debía desaprovecharse.
diez años después, Gerwig se convirtió en la quinta mujer en la historia de los oscar en ser nominada a mejor dirección, por Lady Bird. el film, que se estrena pasado mañana, tiene también nominaciones en las categorías de mejor película, mejor guion original, mejor actriz (para saoirse ronan) y mejor actriz de reparto para Laurie metcalf (ver aparte). Habrá que esperar al próximo domingo (el día de la entrega de los oscar) para ver si Gerwig tiene la misma suerte de su amigo Jenkins, director de Moonlight, la ganadora como mejor película en 2017.
el recorrido profesional que hizo Gerwig durante esa década fue de actriz desconocida a princesa del cine
mumblecore (nombre que se le dio al cine norteamericano más radical mente independiente de los 2000) y ahora guionista y directora digna de elogios y premios. aunque su ambición cuando estudiaba en la universidad era ser dramaturga, Gerwig dejó de lado los escenarios para involucrarse en producciones independientes como
LOL, de Joe swanberg; Baghead, de los hermanos Jay y mark duplass, y The
House of the Devil, de ti West, entre otras. Continúa en la página 2