LA NACION

Valor relativo River rescató un punto en Río, pero futbolísti­camente no puede escapar de su fragilidad

- Juan Patricio Balbi Vignolo

RÍO DE JANEIRO.– No hubo click. No se produjo la reacción que Marcelo Gallardo esperaba en un partido crucial. No apareció el espíritu copero ni el corazón guerrero de los gajos que quedaron de aquel equipo ganador. Pero River, con esa pequeña pizca de fortuna que se necesita en la Copa Libertador­es, se trajo de Brasil un empate 2-2 que sabe a más que un punto en el debut.

Lejos de traer respuestas, el inicio de la competenci­a internacio­nal pintó lo que se pudo ver en el inicio de un problemáti­co 2018: demasiado poco vuelo futbolísti­co para un equipo con un alto poderío individual. En un duelo chato, Flamengo supo exponer las falencias del equipo de Núñez, que sigue navegando en medio de la tormenta y suma interrogan­tes a su diluido presente.

“No se la den más, no se la den más”, fue uno de los gritos que salió de la garganta de Enzo Pérez hacia sus compañeros a los 31 minutos del segundotie­mpo,conelmarca­dor2-1 en contra, cuando un rival se encontraba en el suelo por un golpe en un choque. Al ver que Martínez Quarta devolvió la pelota en un lateral, el volante le recriminó la acción con un grito y un gesto al defensor.

River fue un fiel reflejo de esa situación: impotencia pura y cero equilibrio. Sin el rendimient­o esperado de los refuerzos, encontró rebeldía, coraje y alma en dos jugadores a los que extrañaba por su continua adaptación: Mora, la figura por su entrega y compromiso, y Mayada, por su vital ingreso. Los uruguayos se pusieron la capa goleadora para igualar dos veces un encuentro que se le hizo cuesta arriba durante toda la segunda parte por los festejos de Henrique Dourado y Everton.

Con un 4-1-4-1 (que se movía a 4-33) con Ponzio como único volante central, Enzo Pérez y Zuculini como internos, más Mora y De La Cruz en las bandas, el equipo de Gallardo no logró una versión superadora. Pasivo y sin explosión, le costó llegar con claridad y solo consiguió aproximars­e con pelotazos cruzados, centros desde las bandas y alguna pelota parada. Volvió a mostrar problemas en la marca y el retroceso.

Hoy, ya cuesta encontrar alguna individual­idad que lo rescate para conseguir una victoria: los niveles de Ponzio y Enzo Pérez son bajos, De La Cruz y Pratto no aparecen, y Mora es la única carta de ataque. Así, las ausencias en el equipo titular de Scocco y Quintero, dos de los futbolista­s que han aportado algo diferente en los últimos partidos, tienen poca explicació­n.

El cabezazo de Mora (en offside) y el zapatazo en el cierre de Mayada fueron dos oasis para River en un juego que en varios tramos se transformó en un eterno bostezo. Ante un vacío, pero impactante Estadio Olímpico Nilton Santos (con capacidad para 45 mil espectador­es), la soledad fue predominan­te: se vio poco fútbol colectivo de ambos equipos y mínimas ideas para romper esquemas. Flamengo y River se neutraliza­ron mutuamente y el partido por momentos se transformó en un bostezo inevitable.

Así, el ambiente fue totalmente disímil de lo que se suele vivir en cualquier país sudamerica­no en la Libertador­es: sin público por la sanción de Conmebol al equipo brasileño, únicamente alrededor de 300 personas pudieron observar las acciones entre el campo y las tribunas. Gritos, protestas, aplausos, insultos y festejos de los jugadores predominar­on la escena de un partido de bajo vuelo. Afuera, las calles del barrio de Engenho de Dentro tuvieron paz, ya que tan solo unos 100 hinchas del Mengão se acercaron a las inmediacio­nes del estadio para alentar e intentar, sin suerte, infiltrars­e.

Tras un partido completame­nte extraño por el contexto, River vuelve de Brasil con un empate en el bolsillo que no le da tranquilid­ad por su rendimient­o y lo obliga a mejorar, pero que a la vez le permite tomar aire y evitar que la caída libre se siga pronuncian­do.

 ?? Leo coRRea / aP ?? Mora, que volvió hace poco de una lesión, es hoy lo mejor de un River que no se encuentra; el 2-2 con Flamengo en el debut en la Copa tiene solo el valor del punto
Leo coRRea / aP Mora, que volvió hace poco de una lesión, es hoy lo mejor de un River que no se encuentra; el 2-2 con Flamengo en el debut en la Copa tiene solo el valor del punto
 ?? AP/L. CORREA ?? Pratto intenta escapar a las marcas de René y de Jonas; River no jugó bien, pero rescató un empate
AP/L. CORREA Pratto intenta escapar a las marcas de René y de Jonas; River no jugó bien, pero rescató un empate
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina