Lento avance del empleo privado
Subió 1,3% anual en diciembre; el mercado total, 2,2%.
El aborto, los extranjeros y, ahora, el empleo. El leitmotiv oficial, incluso hoy, cuando Mauricio Macri inaugure las sesiones ordinarias del Congreso, será animarse a abrir el debate. El mercado laboral, sobre todo el privado registrado (en blanco), creció en 2017 solo a cuentagotas, manteniendo un estancamiento que lleva varios años. Pero esa fragilidad servirá al Gobierno para reiniciar su embestida por la reforma laboral abortada tras los incidentes de fin de año. Ese paquete promete ahora reaparecer dosificado en varios proyectos de ley, modificaciones sectoriales negociadas en los convenios colectivos y las paritarias.
La cantidad de trabajadores registrados –públicos y privados– creció 2,2% en 2017. Se sumaron 268.000 personas al mercado de trabajo, un porcentaje que supera el crecimiento vegetativo anual que muestra la población en condiciones de trabajar, según destacaron en el Gobierno. Sin embargo, no se cuenta en ese cálculo a los informales. El trabajo asalariado privado –el dato que se sigue más de cerca, porque se trata de empleos de mayor calidad– avanzó 1,3% (81.600 nuevos empleados). El sector privado total (asalariados, monotributistas, trabajadoras de casas particulares y autónomos) se expandió 2,2% anual (+192.200 anuales). En 2017, los trabajadores independientes estuvieron en el podio frente a los asalariados, pese a que a lo largo del año esa tendencia se fue revirtiendo a favor del empleo más estable. Esto ocurrió, por caso, en diciembre.
El sector que empujó con mayor fuerza fue la construcción, que en 2017 sumó 42.600 trabajadores (+10,3%). Pero junto con el avance de la actividad (ver aparte) traccionaron las actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler (+17,2%) y el comercio (+12,3%). Pese a que el Ministerio de Producción afirma que un 40% de la industria, sobre todo la ligada al campo y a la construcción, ya genera empleo, el neto sigue siendo negativo. El sector manufacturero perdió 17.600 trabajadores el año pasado (-1,5%).
“Sigue creciendo el empleo. La política macro y micro está funcionando. Pero hay que hacer más”, afirmó José Anchorena, subsecretario de Programación Técnica y Estudios Laborales del Ministerio de Trabajo, al presentar los datos del SIPA.
“Se precisan modificaciones en el campo laboral y se van a discutir en los próximos meses. Tiene que haber más propuestas, que se genere el debate, si no el empleo registrado va a crecer, pero en un número que no alcanza para dar soluciones a los informales, aquellos que quieren trabajar más horas, los vulnerables y los desempleados”, describió el funcionario. Señaló que en el país hay cerca de 9 millones de trabajadores con problemas de empleo.
En diciembre se registraron 10.800 trabajadores nuevos en el sector privado asalariado. En la cartera que conduce Jorge Triaca estiman que si mantienen constante ese número de creación de trabajo en los próximos meses sumará a fin de este año cerca de 130.000 empleados. Se trataría de un incremento de casi el 60% a fin de 2018 y al comienzo de un año electoral.
Justamente, la Encuesta de Indicadores Laborales (EIL) de enero mostró un avance interanual del empleo del 1,5%. Las expectativas de contratación al finalizar el primer trimestre son de +5,4%. Es un dato inferior al que mostró este indicador en el último semestre, pero aún se ubica en la parte superior de la franja de expectativas que la subsecretaría observa como predictiva de la creación concreta de empleo.
“En 2018, las expectativas de empleo ponen de manifiesto una menor incidencia de recortes en las dotaciones”, explicó María Laura Calí, directora de SEL, a la nacion. La socióloga afirmó que en 2016 las bajas en las dotaciones fueron fuertes, cualquiera sea el tamaño de la compañía; el año pasado se acentuaron en microempresas, mientras que en pymes y grandes firmas el balance fue positivo. “Para 2018, la diferencia neta entre los recortes y los aumentos da positivo, cualquiera sea el tamaño de la compañía. Llega a +16 en microempresas, +15 en pymes y a +18 en las grandes. Sin embargo, las expectativas de aumento no crecen. Priman las expectativas de mantención de las dotaciones”, cerró Calí.
El Estado, en tanto, siguió contratando personal en 2017, pero a un nivel muy por debajo de la proporción que caracterizó a la gestión kirchnerista. En 2017 se sumaron 38.500 trabajadores (+1,2%). Según Trabajo, cada diez trabajadores que se incorporaban al sector privado entre 2012 y 2015 unos 15 ingresaban al entramado público. En 2016, fueron 13. Y en 2017, solo dos.