Santos Borré no necesita que le den muchos minutos para aportarle réditos a river
Figurita repetida. En otra noche difícil, el técnico Marcelo Gallardo miró hacia el banco y volvió a confiar en Rafael Santos Borré para renovar el ataque. Y el colombiano no decepcionó: al igual que frente Racing, abrió el marcador y asistió a Pratto para el 2-0 ante Rosario Central. Así, River logró su quinta victoria en fila en la Superliga, sueña con su ingreso a la Copa Libertadores 2019 y lleva nueve encuentros invicto.
De Barranquilla a Buenos Aires, para Borré cada oportunidad es un desafío: con Scocco, Mora y Pratto como competidores internos, más el lento regreso de Larrondo (ayer jugó en Reserva), el delantero de 22 años corre desde atrás buscando su lugar.
Por eso, exprimir su poco tiempo en la cancha es una obligación: durante 2018 solo fue titular en tres e ingresó en cinco (siempre después de los 20 del segundo tiempo) de los 13 partidos de River. Y su tarea la cumple con creces: ayer marcó su séptimo gol en 27 encuentros, de los cuales en 11 integró el equipo inicial y en siete fue reemplazado. Así, con 1071 minutos de juego, promedia un festejo cada 153 minutos.
“De a poco me voy adaptando, conozco más a los compañeros y eso suma a la confianza. Me siento tranquilo porque vamos agarrando forma. Marcelo (Gallardo) sabe que cada jugador le puede aportar algo. Venimos trabajando muy bien, los que juegan y los que tenemos la oportunidad de entrar. Y la competencia interna la llevamos con tranquilidad, sabiendo que al que le toque estar debe aportar para que el técnico pueda decidir”, comentó Borré tras el partido ante la consulta de la nacion.
Por fuera de los duelos oficiales, el colombiano también tiene tres tantos en los tres amistosos que jugó: le marcó a Boca en el 1-0 veraniego y anotó un doblete en el amistoso del pasado 24 de marzo que terminó 3-0 con la Universidad de Chile.
“El partido en Chile fue importante, me llenó de confianza y me permitió tener más madurez para aprovechar cada minuto. Hay que seguir sumando porque el equipo se viene sintiendo más cómodo. Es importante estar preparado y demostrar que todos tenemos un buen momento”, destacó Borré y comentó lo que le pide el DT: “Principalmente, que cuando los pasadores estén de frente a la defensa, trate de aprovechar mis movimientos con diagonales a las espaldas de los centrales e intentar recibir perfilado frente al arco”.
Tras debutar en 2013 en Deportivo Cali, pasar en 2016 a Atlético de Madrid por 6 millones de euros (no jugó oficialmente) y estar un año a préstamo en Villarreal, en Núñez apostaron fuerte por él en agosto de 2017: le compraron el 50% del pase por 3,5 millones de euros. Además, si no lo vende para enero de 2019 por más de 14 millones, deberán desembolsar otros 3,5 millones por un 25% más de su ficha.
Más allá de los números, tiene una alta consideración en el cuerpo técnico. “Me encanta cómo se mueve en la última línea del rival y vive del gol, le gusta como a todos los delanteros. Su confianza le da aire al equipo y cuando juega lo aprovecha bien”, señaló Gallardo, y agregó: “Hubiésemos querido que tuviera ese período de adaptación con menos minutos para que se acostumbrara a la vida en la Argentina. Suele costar y debió transitarlo más rápido que lo normal. Pero trabaja muy bien para ganarse el respeto del hincha y de sus compañeros”. Pese a sus escasos minutos, River disfruta las respuestas que Santos Borré le brinda.