Pro pagará unos $2.000.000 para comprar el búnker donde forjó su poder
Aseguran que es una “señal de permanencia”; en el edificio se definen estrategias electorales y planes de gobierno
Es una operación inmobiliaria de alrededor de dos millones de dólares, pero el principal valor para Pro es el simbólico. Los referentes del partido creen que la decisión de comprar el búnker de Balcarce 412, donde Mauricio Macri tejió la estrategia que lo llevó a la Casa Rosada, es una demostración de su “vocación de permanencia” política. “Es el lugar donde ganamos en las grandes ligas. Tenemos una proyección a mediano y largo plazo”, afirman cerca del Presidente.
La adquisición del edificio, que fue aprobada durante la última reunión del consejo nacional de Pro, se concretaría durante las próximas semanas. Hoy, las autoridades partidarias prevén escriturar dentro de 90 días y aspiran a invertir alrededor de 42 millones de pesos (más de US$2.000.000) en la operación. Sin embargo, fuentes ligadas a la negociación creen que la compra se cerrará en una suma más elevada.
Desde Pro consideran que esa inversión implicará un ahorro a largo plazo. Pagan unos 500.000 pesos mensuales para alquilar el edificio de cinco plantas y un subsuelo ubicado en la esquina de la avenida Belgrano y Balcarce, en el barrio porteño de Monserrat, a cuatro cuadras de la Casa Rosada. “Si buscábamos otro lugar, íbamos a tener que poner más plata para dejarlo a punto”, afirmó a la nacion un dirigente que participa de la negociación para comprarle el inmueble a una sociedad de inversión.
Para afrontar los gastos de la operación, el partido invertirá parte de los fondos que recaudó durante el año pasado para el “desarrollo institucional” de Pro nacional. “Está todo en el balance que mandamos a la Cámara Nacional Electoral”, señalaron.
Los principales dirigentes de Pro consideran que la decisión de comprar el búnker que Macri montó en 2014 para su campaña presidencial es una señal de la “vocación de permanencia” del partido. También hay un sentido de pertenencia con “Balcarce”, la “casa de Pro”. “Es nuestro lugar. La compra significa que queremos mantenernos en el mapa político contemporáneo”, comentó a la nacion el secretario general de Pro, Francisco Quintana. Una diputada del oficialismo coincidió con esa visión: “Es una señal de que llegaste para quedarte”.
El documento que se discutió durante la cumbre de Parque Norte incluye una cláusula que establece que la “casa de Pro” solo se podrá vender con el voto del total de los asambleístas del partido.
La cocina de la campaña
En el edificio ya se cocina la campaña de Cambiemos para las presidenciales de 2019. La mesa nacional de Pro se reúne cada quince días en la Casa Rosada o en el búnker partidario. “Tratamos de alternar entre los dos lugares”, afirma el encargado de realizar las convocatorias. A esas reuniones asisten funcionarios que tienen distintos roles en el partido, como el secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis, o el jefe de asesores del presidente, José Torello. En el último encuentro se charló, entre otros temas, sobre la nueva distribución de las oficinas en la sede. La semana pasada se reunió por primera vez en Balcarce la mesa territorial de Cambiemos con la presencia de representantes de Pro, la CC y la UCR.
“Queremos darle vida a Balcarce”, comenta una autoridad del partido. Recientemente, se realizaron obras para remodelar una parte del edificio.
El segundo y el tercer piso del búnker son las áreas de mayor movimiento. En el segundo se trabaja en el armado de la campaña y el diseño de la estrategia comunicacional para cada distrito del país. Suelen transitar el piso el secretario nacional de movilización y voluntariado de Pro, Federico Morales, y Guillermo Riera, dos estrategas de campaña del riñón del jefe de Gabinete, Marcos Peña.
En el tercer piso están las oficinas de las autoridades ejecutivas de Pro, Schiavoni y Quintana, y los encargados de finanzas y apoderados del partido, como Torello y Santiago Alberdi. El cuarto está ocupado parcialmente por los equipos de administración y legales de Pro CABA. El G-25, que inserta profesionales del ámbito privado en la política, conserva una oficina, pero en esa planta desembarcarían la Secretaría de Gobiernos Locales, que lidera Jorge Macri, y la Fundación Pensar, a cargo de Carmen Polledo, que volverá a funcionar en la sede de Balcarce 412. El objetivo es colaborar en la elaboración de planes de gestión.
El despacho del quinto piso que utilizó Macri hasta diciembre de 2015 permanece cerrado. Hubo pocas reuniones en esa oficina durante los últimos dos años. La oficina solo se abre para recibir la visita de funcionarios extranjeros o el brindis de fin de año. Con Macri asentado en la Casa Rosada y la quinta de Olivos, en Pro entienden que es hora de utilizar el lugar para sumar nuevos espacios de trabajo en el búnker. “No tiene sentido conservarlo. Mauricio no va nunca y necesitamos ese espacio para poner diez oficinas. Hay mucho trabajo por hacer”, cuenta una autoridad del partido.
En Balcarce afirman que el despacho se conserva tal cual lo dejó Macri hace más de dos años. Está amueblado, tiene un amplio balcón y una sala de TV. Hay fotos de la campaña de 2015, un cuadro con una imagen de la Bombonera y hasta un metegol.
En un rincón del quinto piso hay una maqueta que describe a quien habitó el lugar durante años: es una reproducción a escala de una cancha de fútbol que tiene a la Casa Rosada plantada en uno de los arcos.